El fotógrafo Lucien Clergue muestra al Pablo Picasso más íntimo y fumador

A partir de este martes y hasta el próximo 20 de octubre, el Museo Picasso en Barcelona (España) ofrece esta exposición, que se nutre de algunas de las seiscientas imágenes del fondo del francés Clergue

Foto: EFE

EFE / La Voz de Michoacán

Barcelona. En los toros; bailando en una fiesta gitana con Manitas de Plata; en bañador, en la playa; muchas veces con un cigarrillo en la mano; incluso reflejando su ausencia en el taller vacío de Notre-Dame-de-Vie. Así mostró el fotógrafo Lucien Clergue a su amigo Pablo Picasso, tal como da cuenta la nueva exposición "Picasso-Clergue".

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A partir de este martes y hasta el próximo 20 de octubre, el Museo Picasso en Barcelona (España) ofrece esta exposición, que se nutre de algunas de las seiscientas imágenes del fondo del francés Clergue, que documentan una amistad de veinte años, desde 1953 y hasta la muerte del pintor español, fraguada en el sur de Francia, donde los dos artistas vivían.

La institución barcelonesa adquirió su fondo en 2016, con piezas que ya se pudieron ver en otra exposición en 2019.

Coincidiendo con esta muestra, el centro barcelonés también programa otra exposición en las mismas fechas, más académica, "Brigitte Baer. Picasso y los grabados", donde destaca el trabajo de la experta más importante de los grabados del pintor, a través de sus fichas catalogadas y sus fotografías de reproducción de las obras del artista.

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El director del Museo Picasso, Emmanuel Guigon, acompañado por las comisarias Sílvia Domènech y Núria Solé, aseveró este lunes que son dos exposiciones a la vez "diferentes y similares", a partir de los archivos de la institución, que "nos regalan nuevos retos e historias".

Las imágenes de Lucien Clergue (1934-2014), tal como él mismo había dejado escrito, cuentan veinte años de una relación de amistad entre dos personas que se llevaban 53 años de diferencia, "un mundo y, a la vez, ¡nada!. Tenía ese don de ponerle a uno en pie de igualdad".

Ambos se conocieron en 1953, cuando a la salida de una corrida de toros en Arlés (Francia), de donde el fotógrafo era originario, éste, de apenas 19 años, le presentó sus primeras imágenes y aprovechó para fotografiarlo.
Dos años más tarde, se reencontraron en la casa de Picasso en Cannes (Francia), La Californie, y a lo largo de casi dos décadas el artista le abrió sus puertas para que plasmara su cotidianidad, ya fuera vestido con traje y corbata en una plaza de toros, en batín y sandalias en casa o junto a Jacqueline Roque, musa y segunda esposa del pintor, la actriz y modelo Lucía Bosé y el torero Luis Miguel Dominguín.

Para Guigon, las imágenes constituyen "el diario de una amistad, de una vida de complicidades".

Además de sus series de desnudos, retratos y paisajes, Clergue es también conocido por sus cortometrajes y películas como "Picasso, guerre, amour et paix", de 1971, de la que en la exposición se ofrecen dos fragmentos.

El recorrido expositivo termina con unas significativas instantáneas del 11 de septiembre de 1978, cinco años después de la muerte del pintor, cuando Clergue visitó su taller, la primera vez que se encontró con Jacqueline en ese lugar vacío, captando "su tristeza" y la "ausencia" de su amigo.