AP/La Voz de Michoacán Nueva York. Cuarenta años después de una estampida que dejó 11 personas muertas y 23 lesionados en un concierto de The Who en Cincinnati, Pete Townshend dijo que siempre han lamentado no quedarse para lidiar con las consecuencias. La banda se fue del Riverfront Coliseum el 3 de diciembre de 1979, para ir a Buffalo, Nueva York, donde era la siguiente parada de su gira. “No nos lo perdono. Debimos habernos quedado”, dijo Townshend a The Associated Press durante una entrevista reciente para promover su primera novela “The Age of Anxiety”. La tragedia ocurrió mientras los fans rodeaban la arena con la esperanza de tener un lugar cerca del escenario. Miles habían esperado por horas para entrar y lo hicieron corriendo pues los lugares serían asignados conforme llegaran. La banda no se enteró del accidente hasta después del concierto. Townshend recordó al mánager Bill Curbishley diciéndole a él: “tengo algo terrible que contarte”. Townshend describió el shock de ver cuerpos sobre el piso al salir del estadio, “muchos de los cuales no estaban muertos”, dijo. “No sabían quién estaba muerto y quién estaba gravemente herido, quizá eran unos 40 cuerpos con sábanas encima”. Townshend recordó la rabia que sintió contra Curbishley por no decirle a la banda antes del concierto, y admitió que “queríamos matarlo”. “Al menos debió darnos la opción de si queríamos presentarnos o no”, dijo Townshend. “Pero esa elección no la tomamos nosotros, lo que fue igualmente sombrío fue que dejamos el edificio. Debimos habernos quedado”, agregó. Curbishley rechazó hacer declaraciones cuando The Associated Press se puso en contacto con él. Sin embargo, en una entrevista con WCPO de Cincinnati, dijo que luchó con las autoridades e insistió para que el concierto continuara con el fin de que no hubiese más disturbios, y cree que de esa manera salvó vidas. “Les dije ‘si los detienen van a tener más problemas en la arena. Podría haber más gente herida, y si regresan los equipos médicos no podrán lidiar con lo que están haciendo”, dijo a WCPO. “Si mantener a mi banda en el escenario salva una vida para mí se trata de eso”. El vocalista Roger Daltrey visitó un memorial en una preparatoria cerca de Cincinnati en 2018, pero la banda completa no ha regresado. Todo esto va a cambiar, Townshend dijo que planean regresar y hay un anuncio previsto para más adelante el martes. Townshend dijo que no deja de pensar en los padres que perdieron a sus hijos. “No todo se trata de rock ‘n’ roll. Se trata de chicos de Cincinnati que murieron, chicos de Cincinnati cuyos padres pasaron por un trauma, chicos de Cincinnati que quedaron discapacitados o heridos, dañados por lo que ocurrió ahí”, dijo Townshend. Una tragedia similar ocurrió en el 2000 en el Roskilde Music Festival en Dinamarca. Después de que Pearl Jam llegara al escenario hubo una estampida en la que murieron nueve personas y 28 quedaron heridas. Townshend dijo que llamó al vocalista de la banda Eddie Vedder y le dijo que se quedara ahí. “No se vayan, no me importa si tienen otro festival mañana por un millón de euros. Quédense ahí. Y se quedaron por tres días, y creo que eso ayudó realmente”, dijo Townshend. Townshend considera que ha pasado suficiente tiempo para tener una conversación profunda sobre la tragedia en Cincinnati. “¿Cómo somos responsables? ... ahora podemos tener una conversación al respecto cuando regresemos. Esa conversación ocurrirá. Nos reuniremos con personas y estaremos ahí, estaremos ahí. Eso es lo importante. Estoy tan complacido de que tengamos esta oportunidad de regresar”, dijo. “Pero sí creo que una de las cosas que ocurrieron en aquel entonces fue que nosotros salimos corriendo”.