La actriz Jennifer Lawrence confesó que sufre de ansiedad como uno de los efectos que la fama ha dejado en su vida. Admitió que ha buscado en Google información sobre ella y sobre todo recordó que fue muy difícil la experiencia de promover el primer filme de “Los Juegos del Hambre” (la última cinta de la saga llega el próximo noviembre). “Por fuera parece que estoy teniendo una explosión, y lo estoy, al menos en ciertos niveles. Ahí estaba yo, sólo una chica de Kentucky siendo descubierta por el viejo Hollywood”, declaró a “The New York Times”. Aunque ahora ya se siente más en control con la fama, aún le asusta decir cualquier cosa por temor a ser malinterpretada. “Alguna vez busqué en Google 'Jennifer Lawrence Fea'. No puedo pensar en un uso más inútil de mi tiempo que preocuparme sobre esto. ¿Por qué me importa lo que la gente piensa? Pero lo hago. No puedo pretender que no me importa… El mundo opina sobre ti sin conocerte. Eso no debería preocuparme pero sí, me molesta”, explicó. También reveló que ha tomado medicamentos para la ansiedad, algo con lo que lidia sobre todo al tratar de separar su vida pública de su vida privada. “Encuentro cierta paz pensando en mí en público como una especie de avatar… y sólo trato de ser yo misma y enfocarme en las cosas importantes”.