El diagnóstico de Parkinson tuvo un impacto depresivo en Robin Williams, pero no la razón que lo motivara a suicidarse, aseguran fuentes familiares del actor, según publica la página de noticias de farándula estadounidense, TMZ.com. De acuerdo con el portal, Williams, que falleció el pasado 10 de agosto a los 63 años, luego de colgarse con un cinturón en su casa en San Francisco, estaba luchando con el diagnóstico como cualquiera. Estiman que las noticias sobre la enfermedad "exacerbaron" su depresivo estado mental. El actor habría estado en tratamiento médico para reducir el progreso del Parkinson, pero que la mezcla de fármacos tuvo un impacto negativo en su estado mental. Las fuentes familiares aseguraron a TMZ.com que el suicidio fue resultado de una depresión intensa y crónica que persiguió al actor por mucho tiempo.