En una oscura oficina judicial de la década de los 40, el joven español Ramón Mercader es interrogado por varios detectives. El duro interrogatorio se extiende por varios días pero Mercader se mantiene firme, sin confesar que ha asesinado a León Trotsky en Ciudad de México, aunque las evidencias apuntan al homicidio. Mercader fue quien dio la orden de ejecutar al disidente ruso en 1940, que desde años era buscado por el premier ruso José Stalin. Para lograrlo se sirvió de una joven que se enamoró de él y fue su acceso a Trotsky. "Es una historia muy jugosa porque es la consumación de una gran traición, no solamente traiciona a los secretarios de Trosky y a la policía mexicana, más que traicionarla la engaña, sino que traicionó a una persona que se ha entregado a él de cuerpo y alma", dijo el director del filme Antonio Chavarrías. "Eso es muy sugerente, le da una complejidad a una trama que es una trama criminal". México fue el último país que se atrevió a recibir a Trosky en 1937, pese a que pesaba una condena de muerte sobre su cabeza. Llegó gracias a las gestiones del pintor muralista Diego Rivera, militante del Partido Comunista mexicano, y con la venia del presidente Lázaro Cárdenas, uno de los pocos mandatarios con tendencias de izquierda en el país, que también recibió a numerosos exiliados de la guerra civil española. Al director del filme Antonio Chavarrías, le llevó años hacer la cinta "El elegido", que actualmente se filma en el Club de Periodistas de México. Nuestro país fue la última nación que se atrevió a recibir a Trotsky en 1937, gracias a gestiones del pintor muralista Rivera. Se planea estrenarla en 2016 y se espera que además de México y España llegue a más países.