El pequeño Mauro Pedraza Contreras, fue bautizado después de diez meses de nacido, en un festejo sin igual; donde además de contar con atractivos para los adultos, los niños invitados pudieron gozar de un espacio con juegos y atracciones por demás divertidas. Juan Pedraza y Elizabeth Contreras, padres del infante, ofrecieron una birria de res adobada y bañada en una salsa roja. Las bebidas incluyeron brandi, cerveza, tequila y para los niños refresco. Familiares y amigos de los padres, venidos de distintos lugares de México como Aguas Calientes, Guadalajara y San Luis Potosí; llegaron con mucho entusiasmo, para festejar la ocasión. En medio de chistes, regalos y buena vibra, todos pudieron felicitar al pequeño Mauro. “Le tumbaron los cuernitos” mencionaron los invitados.