Morelia, Michoacán.- Con un vestido blanco confeccionado hasta el suelo, adornado con encaje floral, velo fino y transparente, zapatillas altas y elegantes, y un ramo verde atascado de pétalos; Jessica Ramos le dió el “si acepto” a Pavel Sánchez. Juntos, organizaron una espectacular boda y compartieron con los invitados su enorme emoción. Entrada la noche, los novios bailaron un vals que cautivó a los presentes sentados en las mesas. La musicalización tranquila fue factor clave para que los pasos de baile se coordinaran y además, dejaran entrever el enamoramiento de la feliz pareja. Al tiempo que las melodías pasaron de tranquilas a románticas, platos con pechuga de pollo a la hawaiana adentro, incursionaron en las bocas de los invitados con el rol de “platillo fuerte”. Brindis, baile, buen ambiente, comida y un sinfín de festejos, se manifestaron en abundancia en la boda de los dos enamorados.