Adrián Bucio/La Voz de Michoacán Alegría y amor. Con esos dos elementos, Jesús Ferreyra y Alejandra Madrigal unieron sus vidas en una celebración que incluyó cena exquisita, baile, vals, y goce de los más de cien invitados que asistieron a presenciar la boda. En la recepción, los invitados fueron recibidos con una cerveza artesanal producida y elaborada por la familia del novio. La combinación de lúpulo, malta y levadura se conjuntó en las bebidas ofrecidas a los asistentes. “Es un regalo fabricado en la familia”, admitió el novio. La cena consistió en un bufete variado con temática regional mexicana. Platillos típicos de la gastronomía del país fueron presentados y puestos a disposición de los presentes. Pollo, tamales, uchepos y demás recetas fueron preparadas para la especial ocasión. Los novios bailaron, brindaron, festejaron y compartieron su emoción nupcial en compañía de sus familiares queridos y amigos. Los invitados, venidos de diferentes partes del país como Zacatecas, Monterrey, Zacapu, Atlacomulco y por supuesto, Michoacán, gozaron de la celebración.