El Universal/La Voz de Michoacán Los investigadores aseguran que los hombres sufrieron un gran aumento de cortisol, la hormona del estrés, cuando se encontraban con alguien del sexo opuesto que le parecía atractiva. “No eran modelos, sino estudiantes universitarias. Guapas sí, pero chicas normales que colaboraron con nosotros”, explicó Alicia Salvador, codirectora del estudio y catedrática de Psicobiología. De acuerdo a los expertos, cuando una persona produce durante mucho tiempo cortisol puede desarrollar numerosas enfermedades y trastornos, sin embargo, esta dosis es necesaria para poder enfrentarse a los diversos problemas diarios. Este efecto hormonal también es tomado como “una respuesta de preparación para el cortejo”. El estudio publicado en la revista científica norteamericana Hormones and Behaviour, se basó en comprender cómo las hormonas influyen en la apariencia, comportamientos, pensamientos, emociones, y viceversa. Para llegar esa conclusión, los investigadores reunieron a 84 estudiantes varones de 21 años de edad, para realizar unas supuestas tareas en una computadora. Cada uno de los voluntarios tuvo que esperar en una sala, donde aparecía una mujer que tomaba asiento junto a ellos durante cinco minutos. Esto concluyó que aquellos estudiantes que consideraban la mujer como atractiva sufrieron un gran aumento de cortisol. En cambio si la joven no les resultaba de su agrado no sufrían ningún cambio hormonal.