El Universal/La Voz de Michoacán Ciudad de México. Logra un equilibrio en tu maquillaje del día a día y resalta las facciones naturales de tu rostro usando la colorimetría, la ciencia que estudia la medida del color. Clara: En este tipo de pieles, la filosofía de "menos es más" es la clave. Las pieles claras resaltan más cuando el maquillaje se lleva en tonos naturales con algunos acentos que le den contraste. Es por eso que enfocarse en una sola parte del rostro como los ojos o labios es más que suficiente. Para esto, las sombras de colores fríos (como rosa claro o salmón) combinados con algunos tonos marrones o champagne son los que más te favorecerán. En cuanto a los labios, opta por colores como rosa, cereza, malva, coral y siena. Debido a la palidez de este tono de piel uno de los productos infalibles es el rubor. Los tonos rosados o melocotón ayudarán a añadir una apariencia más cálida y saludable si es lo que buscas. Neutra: Este tipo de piel tiene vestigios tanto de tonos cálidos como fríos, volviéndolo uno de los tipos de piel más versátil a la hora de maquillar. Los colores a elegir deben brindar luz a tu rostro, de lo contrario podría lucir opaca. La gama de dorados le darán vida a la mirada armonizando el color natural de la piel. Las sombras en café oscuro a claro favorecerán de igual manera, ya que estos darán armonía a la cara. En cuanto a los tonos de labial y rubor, el nude, rosa, carmín y ciruela hacia pigmentos berenjena favorecerán a este tipo de piel. Si, además, sigues las tendencias de este otoño, puedes experimentar con colores vibrantes, como rosa fucsia o morado. Oscura: Este color de piel tiene una gran variedad de tonos que le quedan espectaculares, desde amarillos hasta marrones oscuros. Entre los pigmentos que más le favorecen están los metálicos, tanto dorados como plateados y acabados "sun kissed", principalmente cuando se aplica en lagrimales o en la parte superior del pómulo. Los rubores no están prohibidos para este tono de piel, pero puede sacarse mucho provecho con tonalidades intensas de rosas, coral, bronce o acabados nacarados. En cuanto a los labiales nunca deben faltar los tonos ciruela, marrón, violeta y el clásico rojo que logrará resaltar con un pop de color. Uno de los mejores consejos es mantener la paleta de color uniforme contando con un protagonista sea en sombra o labios. Los tonos beige, champagne y terracotas pueden ser parte de la paleta de color que complemente cualquier tipo de maquillaje.