Adrián Bucio / La Voz de Michoacán La boda de Mario Novoa y Susana Sánchez entregó a los invitados una noche digna de la emoción, la felicidad, el amor y la alegría. La fiesta, realizada en el salón “El molino”, estuvo compuesta por una cena de gala, asistentes vestidos de manera elegante, un vals familiar y baile inacabable durante toda la celebración. Los papás del novio, Mario Novoa García y Cecilia Bernal, y los de la novia, Juana Medina y Jesús Sánchez, manifestaron su emoción por la unión amorosa de sus hijos. Asimismo, los padrinos Rafael Rodríguez y Leticia Bernal fueron los encargados de atestiguar tanto la celebración religiosa en el templo de “María Auxiliadora”, como la fiesta en el salón. Una gran cena hizo convivir a todos los invitados. Se sirvió una pechuga de pollo acompañada de dos guarniciones: papas y espagueti. Las bebidas fueron variadas: desde limonadas y aguas de sabor hasta licores. Un aproximado de 100 asistentes se deleitó con la variedad en comida y con la mesa de postres. Toda una celebración, amenizada por el grupo de música versátil “Amarato show”, con comida y baile se vivió en la boda de Mario Novoa y Susana Sánchez.
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