Washington, EU.- Dinamarca, seguido de Suecia, son los dos países más felices del mundo. Los habitantes de estas nacionales son las que más motivos tienen para sonreír en el planeta, según el Informe 2016 sobre la Felicidad Mundial elaborado por el Earth Institute de la Universidad de Columbia en Nueva York, para las Naciones Unidas. En Latinoamérica, Honduras ocupa este año el lugar número 104, uno de los últimos en el ránking de los 157 países analizados en el reporte. Otros diez países hispanos entraron en la lista de los 40 más felices: Costa Rica es el primero en aparecer en la lista en el puesto 14, le sigue Puerto Rico (15), Brasil en el 17, México obtuvo el puesto 21, Chile el 24, Panamá el 25, Argentina el 26, Uruguay el 29, Colombia el 31 y Guatemala el 39. El país más infeliz este año es Burundi. Felicidad e infelicidad analizadas en 157 países y con aspectos muy dispares. Por ejemplo en Islandia, Irlanda y Japón no han perdido un ápice de felicidad y podrían haberlo hecho después de la crisis económica o del terremoto y tsunami en Japón. La mayoría de los países menos felices son aquellos afectados por la guerra, crisis económicas, hambrunas y el cambio climático, entre los que se encuentran: Siria, Afganistán, Burundi, Tanzania, Liberia, Madagascar, Ruanda, Togo y Benin. La medición de la felicidad es importante La felicidad ofrece una mejor medida del bienestar humano que la medición de la educación, la salud, la pobreza, el ingreso y el buen gobierno por separado, sostienen los editores del informe. Hay por lo menos siete ingredientes claves para la felicidad: las personas que viven en los países más felices tienen una esperanza de vida más larga, más apoyo social, más libertad para tomar decisiones en la vida, percepciones más bajas de corrupción, experimentan más generosidad y tienen un producto interno bruto más alto per cápita, muestra el informe. No todo es por dinero Islandia e Irlanda sufrieron severas crisis bancarias que afectaron drásticamente sus economías, pero que no afectan en gran medida a la felicidad de sus habitantes, según el informe. Ambos países tienen un alto grado de apoyo social, suficiente para poner a Islandia en tercer lugar e Irlanda en el puesto 19 este año, según el informe. Centrarse estrictamente en el bienestar financiero puede oscurecer un cuadro más completo, según John Helliwell, de la Universidad de Columbia Británica. "En Noruega, es bastante común que las personas pinten las casas de otros a pesar de que pueden permitirse el lujo de pagar a alguien", dijo Helliwell, coeditor del informe y codirector del Instituto Canadiense para la Investigación Avanzada. El acto de ayuda “se convierte en un evento social" dijo Helliwell. "En la comercialización de la actividad -cuando las personas son más propensas a comprar cosas que hacerlas ellas mismas- perdemos algo en el camino".