El Universal / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El Síndrome de Piernas Cansadas (SPC) puede ser difícil de diagnosticar, especialmente porque los síntomas tienden a empeorar en la noche. Así que durante el día, en la consulta con el especialista, las sensaciones son mucho más ligeras. El SPC puede aparecer o empeorar durante el embarazo y es más común en personas con condiciones como: artritis reumatoide, diabetes o anemia. Sin embargo, puede atacar a personas completamente saludables también. Una urgencia (imposible de resistir) de mover las piernas La gente que siente esta urgencia dice que su necesidad por mover las piernas, va acompañada de sensaciones incómodas. Éste es el síntoma principal y necesario para un diagnóstico. Si no lo tienes, no sufres de este Síndrome. Síntomas mejoran al mover las piernas Si las sensaciones de incomodidad no desaparecen al mover las piernas, no es SPC. El alivio puede ser completo o parcial, pero generalmente inicia desde el momento en que se realiza una actividad. Además el alivio persiste siempre y cuando el movimiento continúe. Otro requisito para el diagnóstico. Los síntomas pueden empezar (o empeorar) al descansar Entre más descanses, mayores probabilidades tienes de que ocurran los síntomas. También son un factor importante para la severidad de la incomodidad. Los síntomas empeoran en la noche (especialmente al acostarse) Los síntomas que empeoran durante la noche es otro requisito necesario para diagnosticar este síndrome. Sin embargo, hay personas que sufren de los mismos síntomas durante el día. Los síntomas no te permiten dormir Un número sustancial de personas con este síndrome también tienen movimientos de extremidades periódicos al dormir. Éstos son movimientos repetitivos que ocurren cada 20 a 30 segundos durante la noche y causan interrupciones en el sueño. Si sientes que estos síntomas (u otros) no te permiten dormir, no estás sola, pues la mayoría con SPC sufre de esto. Sin embargo, no es un requisito para el diagnóstico.