Milán .- Giorgio Armani cerró la Semana de la Moda de Milán con un desfile de ropa de caballero que atrajo a celebridades como Kevin Spacey y Ricky Martin. El actor estadounidense y el cantante puertorriqueño estuvieron sentados en primera fila el martes, y Spacey estuvo conversando con la sobrina del diseñador, Roberta Armani, a lo largo del evento. Spacey lució un traje oscuro de sastre mientras que Martin optó por un look más casual, con una camisa tipo túnica de tono claro con cierre al frente, pantalones plisados y un par de gafas de sol Armani. "Él me ha protegido de muchas maneras", dijo el superastro boricua al llegar al desfile. "Estoy muy contento de estar aquí para celebrar su arte". Giorgio Armani se apegó a su exitosa fórmula de líneas limpias e innovación sutil para su colección masculina primavera-verano 2017. Los botones aseguraron cualquier cosa menos camisas. Como regla, en las chaquetas solo uno iba abotonado para un estilo casual. Botones en los ruedos de pantalones anchos enfatizaron suavemente las líneas. Y botones mosca le dieron un encanto anticuado a pantalones de lino claros de talle alto. De hecho, la colección tuvo un aire de nostalgia por la antigua era dandi y al mismo tiempo un aire de modernidad y elegancia gracias a la suavidad de las siluetas. Las chaquetas se agarraron del cuerpo con uno, dos o tres botones, siempre súper ligeras, en lino o algodón. Fueron combinadas con pantalones anchos y camisas de seda. Armani dijo en las notas que las superficies de las prendas fueron tratadas para que parecieran raídas y viejas, evocando "un estilo que se cruza con otras culturas". Una chaqueta de franjas verticales con cuello enrollado recibió un gran aplauso, al igual que una camiseta con un estampado desgastado del rostro del diseñador. La colección incluyó estampados como un patrón de hexágonos que recordaba a azulejos del Medio Oriente, pero la suavidad de los colores nunca superó el efecto mayormente monocromático de la colección. La paleta fue de tonos neutros con algunos acentos en rojo pompeyano. Los zapatos de cuero tenían suelas cubiertas de caucho, algunos modelos con flecos. No hubo sandalias. Los accesorios incluyeron sombreros de ala y otros más casuales tipo pescador.