Puebla.- Perros, gatos, loros, tortugas, reptiles, hurones y conejos, entre otras mascotas, son para muchas personas compañeros, “amigos” e “hijos”, por lo que cuando estos animales mueren, sus dueños buscan darles una despedida especial. En entrevista con Notimex, Claudia Alonso Rivera, gerente administrativa de una empresa dedicada a servicios funerarios para mascotas, señaló la necesidad de que quienes sufren la pérdida de una mascota reciban atención de un psicólogo o tanatólogo. La bióloga de profesión mencionó que el mercado de mascotas ha cambiado y en varios países, incluso en México, hay hoteles para perros, spa y restaurantes, que permiten el ingreso de las mascotas, pero en cuanto a servicios funerarios no se ha dado esta evolución. A unas semanas de abrir sus puertas, la empresa Memorial Friends, ya ha ofrecido sus servicios a varias personas, quienes le han confesado que las urnas las guardan en lugares especiales de sus casas, en la sala, en sus recámaras, en el jardín o en los sitios que eran los preferidos de los animales. Alonso Rivera consideró que este tipo de servicios funerarios resultan ser una opción limpia para la ciudadanía, porque con ello, se evita que se arrojen los animales muertos a las barrancas, ríos, matorrales o lugares abandonados. Relató que este proyecto surgió a raíz de la muerte de su perrita, de raza cocker, y como era un ser vivo muy especial para ella demandaba un servicio más integral, especial y profesional, más de contención y comprensión. Años después, dijo, murió la mascota que tenía su mamá, quien por la pérdida de su mascota se puso mal anímicamente durante el duelo, por lo que requería de un servicio que fuera más de trato humano. Sostuvo que en ambos casos recurrieron a la cremación, pero fue un proceso que ambas sintieron que no fue personalizado ni especial, “pues el trato a los animales fue muy frío”. Señaló que lo que ofrece la empresa no es la cremación como tal, sino un servicio integral, donde las personas que pierden a su mascota pueden acudir a este sitio, como si se tratara de una funeraria especial para las mascotas. En el sitio hay habitaciones especiales, donde la familia propietaria de la mascota puede despedirse en privado de ella. Cuando la familia considera que está lista para dejar a su mascota, ésta pasa al área de cremación y más tarde se entregan las cenizas en urnas hechas a base de diversos materiales, colores y formas alusivas a los objetos de un perro o gato u otro tipo de especie. “La empresa entiende el dolor que puede provocar esta pérdida, lo que significa este tipo de seres para muchas personas y por ello, ofrece un servicio en el que la familia se pueda despedir, constatar que las cenizas que le entregan son de verdad las de su mascota”, indicó. Comentó que para lograr que su idea fuera una realidad acudió al Tecnológico de Monterrey en Puebla, donde a través de incubadoras de negocios redondeó su proyecto y la guiaron a través de asesorías, pláticas y planeación.