Kelly Lee Dekay es una joven de 27 años de Nueva York que tenía una obsesión con su cintura. Su inspiración eran personajes como "Jessica Rabbit" y "Tormenta", ejemplos de cinturas estrechas y tras siete años "entrenando" su cuerpo, según cuenta el Daily Mail, Kelly puede 'presumir' de haber conseguido una cintura de 40 centímetros. Para llegar hasta esta escalofriante medida, la neoyorquina ha estado usando un corsé metálico que la ha ayudado a modificar su cuerpo. "A medida que crecía, me empezó a gustar los estilos exagerados y los trajes de los personajes de cómics", explica la estudiante de moda. Según cuenta, de joven era un "marimacho" y que con el corsé ha acabado con la timidez que tenía desde muy niña. "De niña era muy tímida y me encantaba la forma en que se presentaba a los personajes en los cómics. Me encantaba Batman porque dependiendo del traje era otra persona. Entonces pienso que eso es lo que la ropa ajustada hace conmigo, convertirme en mi propio héroe o villano", asegura Kelly. Estos años no han sido fáciles para ella ya que "el corsé puede ser muy restrictivo cuando subes las escaleras y no puedes cargar cosas pesadas porque puedes hacerte mucho daño. He hecho excursionismo con él puesto y fue muy peligroso”. La joven recibe muchos comentarios negativos por este cambio en su cuerpo en las redes sociales, pero a ella no le importan las críticas ya que dice que siempre lo ha hecho por ella. "Me encanta el cambio, y a veces la gente piensa que está relacionado con no quererse a uno mismo, pero lo hago porque puedo y es divertido. Algunos me dicen que no es natural, pero también me he teñido el pelo de azul", comenta la estadounidense. No es el primer caso que se conoce de una chica que quiere reducir su cintura y lo consigue a base de llevar corsés. Michele Kobke, una alemana que llevó esta prenda durante tres años quitándosela solo para ducharse y que pasó de los 63 cm de cintura a los 40 cm. Aunque su objetivo era el record mundial, que estaba en 38 cm...