Redacción / La Voz de Michoacán Coahuila. Hace unos días Don Seferino Hernández Hurtado, de 75 años. a bordo de un triciclo, llevó a su esposa, Galina Uribe Estrada, de 83 años, a vacunar en Celaya, Guanajuato, pues ella padece parkinson y no se puede mover. Ahora, otra historia donde el amor vence cualquier obstáculo ha ocurrido en Piedras Negras, Coahuila, donde un hombre fue captado en la calle llevando a su mamá a que le aplicaran la dosis de inmunización contra el COVID-19. Pero no fue en silla ni a paso lento, pues el hijo, que llegó en una camioneta con su madre a las instalaciones del CONALEP, y al no haber un medio para transportarla hasta el punto de vacunación, la cargó sobre sus hombres, así como ella lo llevó a él entre sus brazos cuando era niño. En este municipio coahuilense, se han vacunado alrededor de 2 mil adultos mayores, en dos sitios que se han habilitado para la campaña.