Redacción/ La Voz de Michoacán China. La historia de Xiao Wang comenzó en 2011 cuando el joven, que en ese entonces tenía 17 años, decidió que era buena idea vender su riñón para así comprar un iPhone y un iPad. Gracias a la ayuda de intermediarios, el joven chino logró su cometido y realizó la transacción por lo equivalente a dos mil 600 euros (unos 58 mil pesos mexicanos aproximadamente). Wang realizó todo esto sin la autorización de sus padres y ocultó toda la información hasta el día de la cirugía, cuando tras algunas complicaciones su familia logró denunciar a las personas involucradas y hubo un total de nueve detenidos, incluido el médico que realizó la operación, acusado de lesiones voluntarias. La historia de Xiao Wang comenzó en 2011 cuando el joven, que en ese entonces tenía 17 años, decidió que era buena idea vender su riñón para así comprar un iPhone y un iPad. Gracias a la ayuda de intermediarios, el joven chino logró su cometido y realizó la transacción por lo equivalente a dos mil 600 euros (unos 58 mil pesos mexicanos aproximadamente). Wang realizó todo esto sin la autorización de sus padres y ocultó toda la información hasta el día de la cirugía, cuando tras algunas complicaciones su familia logró denunciar a las personas involucradas y hubo un total de nueve detenidos, incluido el médico que realizó la operación, acusado de lesiones voluntarias. Pero lo peor pasó luego de la intervención, pues la condición de Xiao Wang empeoró drásticamente, el joven sufrió una insuficiencia renal y actualmente está incapacitado para tener una vida normal. Wang está forzado ahora a permanecer en cama y conectado a una máquina de diálisis, además de necesitar asistencia médica las 24 horas. Los tres intermediarios que pusieron al joven en contacto con los médicos también fueron sentenciados a penas de entre tres y cinco años en prisión; la familia de Xiao Wang recibió una indemnización de unos 17 mil euros (cerca de 374 mil 500 pesos). https://youtu.be/Acr_dFMIKBw Pero lo peor pasó luego de la intervención, pues la condición de Xiao Wang empeoró drásticamente, el joven sufrió una insuficiencia renal y actualmente está incapacitado para tener una vida normal. Wang está forzado ahora a permanecer en cama y conectado a una máquina de diálisis, además de necesitar asistencia médica las 24 horas. Los tres intermediarios que pusieron al joven en contacto con los médicos también fueron sentenciados a penas de entre tres y cinco años en prisión; la familia de Xiao Wang recibió una indemnización de unos 17 mil euros (cerca de 374 mil 500 pesos). Con información de Milenio.