Redacción / La Voz de Michoacán Long Beach. Una expolicía de Long Beach, Estados Unidos, se declaró culpable de homicidio involuntario tras dejar a su hija de tres años dentro de una patrulla. Cassie Hope Barker, de 29 años, confesó ante la Justicia que dejó a la pequeña encerrada, cuando era oficial, para poder tener sexo con su jefe. Cassie Hope podría ser sentenciada a 20 años de prisión por la Corte del Condado de Harrinton en Indiana, Estados Unidos. Cheyenne Hyer, la hija de Barker, fue encontrada muerta dentro de la patrulla de la policía de su madre, en el condado de Hancock, en 2016. Según los informes, la mujer dejó a la niña en el automóvil para ir hasta la casa para hablar con su supervisor después de terminar su turno. Las autoridades dicen que ella tuvo relaciones sexuales con su jefe y se quedó dormida dentro de la residencia. La policía dijo que Cheyenne estuvo en el vehículo durante largas horas. Todavía está pendiente una demanda presentada por el padre de Cheyenne contra el Departamento de Policía de Long Beach y los Servicios de Protección Infantil de Mississippi. Ryan Hyer está demandando a las dos agencias por negligencia en el cumplimiento del deber. Con información de Infobae