El Universal/ La Voz de Michoacán Ciudad de México. "Fue un gran honor que me pidieran que tocara mi música en las nubes, pero fue una de las cosas más difíciles que he hecho, dijo la pianista Evelina de Lain, que en septiembre de este año llevó un piano de cola hasta el Paso de Singela en el Himalaya. La artista de Londres interpretó "Nocturnes No. 2" de Chopin en mi bemol mayor y No. 20 en do aguda menor, "Raindrop" Prélude Op. 28 No. 15, así como composiciones de su álbum solista Soul Journey. Además del gran logro de llevar un piano a las tierras del Himalaya, esto significó un gran logro personal para la pianista, pues hace 14 años, Evelina perdió la capacidad de mover sus manos debido a una lesión por esfuerzo repetitivo. Después de emprender un curso intensivo de terapia, finalmente recuperó la mayor parte del uso de sus manos. "Nunca en un millón de años pensaría que volvería a tocar el piano clásico y mucho menos tocar el concierto clásico más alto", continuó. El "Concierto en las nubes" sirvió para recaudar fondos y crear conciencia sobre la fibrosis quística. El concierto de Evelina, que también involucró la construcción de una sala de conciertos con botellas de plástico recicladas, batió el récord del mejor concierto de música clásica del mundo.
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