El Universal/Agencias Ciudad de México. El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, puso fin a la huelga de hambre que mantenía al interior del Reclusorio Norte. Ello luego de que sufrió una baja de presión y sintió mareos y nauseas; la presión arterial de Duarte de 80/50 lo forzó a ir al servicio médico del reclusorio y tendrá que permanecer en cama por indicaciones médicas hasta que se logre estabilizar su presión. El exgobernador no aceptó que se lo administrara suero pese a ser diagnosticado con hipotensión y deshidratación. Duarte permanece en huelga de hambre, desde el pasado 17 de agosto, en solidaridad, ha señalado, por el trato que se les ha dado a sus ex colaboradores en Veracruz.