Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Cifras por afectaciones del sismo generadas por autoridades federales duplican lo cuantificado en lo local. A 15 días de alta actividad sísmica, la danza de cifras por daños sigue presente. El reporte de la delegación de la Secretaría del Bienestar en el estado de Michoacán reveló que los trabajos de supervisión en las zonas afectadas revelan más de 5 mil 287 viviendas afectadas. De acuerdo con el primer balance estatal realizado por la Secretaría de Gobierno (Segob) la afectación habría sido en más de 3 mil viviendas, que sumado a la infraestructura hospitalaria, educativa y carretera darían más de 400 millones de pesos necesarios para reconstrucción o rehabilitación. El cálculo federal fácilmente superaría esa cifra. Ante el panorama de crecientes daños, el gobierno federal garantizó recursos para la reconstrucción de la Sierra Costa y Costa Michoacana. Las viviendas afectadas presentan daños leves, moderados, pérdida total u otras afectaciones a partir de los más de 4 mil sismos registrados desde el 19 de septiembre de este 2022. Daño sería mayor Lo anterior, se contrasta con las cifras de daños presentadas por parte del gobierno de Michoacán, en dónde se destacan apenas 3 mil viviendas dañadas, de las cuales, menos de la mitad se cuantificaron con daños severos. La información anterior fue presentada por Roberto Pantoja Arzola, delegado de la Secretaría de Bienestar, quien aseguró que lo anterior cuenta con información documentada con elementos de prueba fotográficas. “El gobierno del estado implementa un programa inmediato y el número inicial de viviendas afectadas que nos compartió la Coordinación de Protección Civil era de 3 mil 500. Ya en el barrido nos encontramos con otra realidad. La cifra de 5 mil 287 también encontramos viviendas con afectaciones bajas, media, alta y con pérdida total. Está registrado. Tenemos hasta evidencia fotográfica”, manifestó el delegado de programas federales. Las cifras por daños cuantificadas por el gobierno del estado ascienden a más de 400 millones de pesos en cuanto a lo analizado por daños a viviendas, hospitales, escuelas y tramos de carreteras de jurisdicción estatal. A lo anterior, se sumará el corte de daños que genere la federación a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) presentará su propio corte de afectaciones preliminares a partir de hoy, 7 de octubre y un alcance de reconstrucción de las vías federales de comunicación afectadas. En medio de la disparidad de las cifras, especialistas han señalado que incluso las viviendas de adobe y otros materiales que no presentan daños superficiales deben ser reforzadas, toda vez que ante la alta carga de fuerzas, la pérdida capacidad de sismoresistencia representa un riesgo para futuros eventos en la zona que es altamente activa. A pesar del creciente número de afectaciones y la desaparición de programas como el Fondo para Desastres Naturales (Fonden) desde hace más de dos años, el recurso para la reconstrucción de las zonas afectadas del estado está “garantizado”. Pantoja Arzola aclaró que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) cuenta con partidas para la atención de zonas siniestradas cómo ya ocurrió en otros desastres naturales. “Hay una bolsa precisamente para esto y el presidente no ha escatimado en los recursos. Se ha tenido bien a etiquetar el recurso de la Tesorería de la Federación para poder atender este tipo de contingencia. El recurso está garantizado y pues ese es el procedimiento al cual tendremos que acceder a partir de la declaración de zonas de desastre por los efectos del sismo”, manifestó. Este fin de semana, Apatzingán se sumó al listado de daños generados por los movimientos telúricos. En este caso, más que daños a viviendas, son los percances en infraestructura educativa y hospitalaria los que llevaron a incluir a la demarcación de la región de la tierra caliente. En total, son 5 municipios de tres regiones distintas las que presentaron daños por la actividad sísmica y los cuales incluso ya están bajo la declaratoria de zona de desastre: Apatzingán, Aquila, Coahuayana, Coalcomán y Chinicuila. Carreteras, el gran problema a liberar En postura de la Segob, la mayor parte de los inmuebles afectados en este caso se encuentran ubicados en la franja de la Costa michoacana y la Sierra Costa, por lo que sumaron una importante cantidad de recursos en rojo a la cuenta de daños que dejó el mes de septiembre del 2022. La lucha por contener los deslizamientos y mantener libres los caminos y carreteras ha tenido un costo importante. Recientemente, especialistas en ingeniería han señalado la urgencia de que se generen mecanismos de anclaje para evitar más aludes en las zonas carreteras de riesgo. Si bien lo anterior se vislumbra costoso, se advierte cómo la única solución a largo plazo para mantener conectadas las distintas regiones.
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