Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Estamos en plena temporada de lluvias y las tormentas pueden registrarse en cualquier momento. Debido al crecimiento de las ciudades, la retención de agua en las partes altas es prácticamente nula, por lo que se generan auténticas crecidas que van a parar a zonas bajas, como lo vemos regularmente en Morelia. Es por ese motivo que tarde o temprano tendrás que transitar por calles plagadas de encharcamientos, a riesgo de estropear el motor de tu carro, sin contar los riesgos a la suspensión, la dirección y hasta el sistema eléctrico. Lo recomendable es que evites pasar por charcos que mojen el motor debido a que la entrada de agua al motor lo puede dañar de manera permanente, ya que funciona aspirando aire que posteriormente comprime, y al recibir agua en vez de aire, el motor se romperá. Bajo este principio, y en caso de que de forma inevitable te quedes atascado en un charco, te hacemos las siguientes recomendaciones. Transita por los carriles centrales: El arroyo de las calles y avenidas está diseñado para que cuando llueve o se inunda el agua escurra hacia los laterales, en donde están localizadas las coladeras. Por ello, el carril central es en el que usualmente hay menos agua estancada. Toma en cuenta el nivel de agua: No te arriesgues a cruzar caminos o calles anegados porque es probable que desconozcas la profundidad del encharcamiento o si hay un tope, un bache o una alcantarilla destapada. En realidad, los vehículos no soportan que el nivel del agua suba más allá de la altura del piso del auto. En los autos deportivos, generalmente la ubicación de las entradas de aire hacia el motor están más cerca del piso, mientras que en otros modelos estas entradas están un poco más arriba; sin embargo, evita que estas entradas se saturen de agua porque el daño será irreversible o, por lo menos, muy costoso. Para calcular la profundidad del agua puedes tomar como referencia postes, señales de tránsito o semáforos. Si desconoces las condiciones del camino o si existen corrientes de agua, lo mejor será esperar.Frena anticipadamente: Antes de “navegar” por el charco, y si lo notas desde antes, frena poco a poco para evitar pasar a gran velocidad por él. Aunque es divertido ver cómo salpica el auto a los coches de a lado, recuerda que puedes causar daño a la parte eléctrica del motor, pues el agua que salpicas puede entrar por cualquier ranura. Además, frenar con anticipación te dará la distancia necesaria con el auto del frente para poder maniobrar con mayor holgura, además de que evita ser alcanzado por las olas que se producen por los otros conductores. Mantén una velocidad constante durante el cruce de un charco: Al pasar por un pequeño estancamiento no dejes de pisar el acelerador sin aumentar la velocidad, pues a través del escape también puede colarse agua hacia el motor. Acelerar de más puede incrementar la cantidad de agua que entra al auto, por lo que la recomendación es mantener una velocidad promedio. Si “navegas” no frenes a fondo y no des volantazos: Sólo desacelera y mantén recta la dirección del auto hasta que puedas recuperar la tracción. Frena un poco para secar los discos: Al salir del anegamiento procura frenar suavemente para secar los discos y que funcionen adecuadamente más adelante.Si manejas un carro de transmisión manual o estándar, mantén el clutch y el acelerador presionados, aun cuando esto fuerce el motor. Este proceso es precisamente el que evita que el agua entre al motor. Al presionar el clutch y el acelerador al mismo tiempo lograrás que el escape arroje gases en todo momento y no entre agua.Si debes frenar dentro del agua, no te preocupes, es posible hacerlo pero debes mantener presionado en todo momento el clutch y cambia la velocidad a neutral. Al reiniciar la marcha no saques el clutch de tu auto, de nueva cuenta no importa que se revolucione demasiado. Si no avanza tu vehículo, puedes soltarlo un poco pero sólo lo necesario para que tu auto avance. Si te topas con un gran charco recuerda que, ante todo, debes salvaguardar tu persona y a tus pasajeros, y en cuanto a lo material, que en este caso es tu auto, proteger el motor, el OBD y las entradas de aire. Una observación importante para los propietarios de SUV o vehículos 4x4 es que no intenten cruzar encharcamientos muy grandes sin antes revisar en el manual las capacidades todoterreno con las que cuenta su vehículo, pues en realidad estos autos están hechos para el tránsito citadino y no son anfibios, por muy rudos que se vean. ¿Ya se te apagó el carro? Ahora vamos con el peor escenario y qué podrías hacer. Si al estar cruzando se te apaga el auto, no intentes volver a encenderlo. En este caso es probable que el agua haya ingresado a uno de los cilindros y al encender de nueva cuenta el agua podrá ingresar al motor, los pistones se doblarán por no poder comprimir el agua y causará más graves daños. Sabemos que estarás desesperado por cuidar tu vehículo pero lo mejor en este momento será que bajes del auto y si te es posible lo empujes a una zona segura. De no ser así, espera por ayuda, recuerda que vale más tu integridad física. También puede ocurrir que el auto siga encendido pero no puedas avanzar más. Esto ocurre porque el auto a perdido adherencia con el pavimento. En este caso no aceleres de forma brusca o muevas el volante porque corres el riesgo de que el agua entre al motor. De nueva cuenta si puedes empújalo a una zona seguro o espera por ayuda. Sabemos que los riesgos al conducir en época de lluvias no son sólo al cruzar una calle inundada, también debes cuidarte del suelo mojado que puede provocar que las llantas de tu auto patinen.