Jorge Manzo / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. A la llegada del gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla “el sistema de salud estaba colapsado”, así lo define el doctor Elías Ibarra Torres. Enfrentaban un déficit de mil millones de pesos y en laudos y demandas más de 500 millones de pesos de compromisos. Ahora, no sólo incrementaron el presupuesto para la Secretaría, sino que la transferencia de hospitales a IMSS Bienestar ayudará a aliviar los servicios médicos, pero aclara que la SSM no desaparece. Cara a Cara para los lectores de La Voz de Michoacán, el responsable de los servicios de salud exaltó que nunca antes se había apoyado al sector salud como ahora. Su análisis cobra peso, pues no es la primera ocasión que ocupa esa posición. “Cuando llegó el gobernador, la Secretaría tenía un presupuesto de 8 mil millones de pesos y se venía arrastrando con un boquete de mil millones de pesos. La historia no es reciente, data desde el 2011”. Expone el martirio que vivía el secretario en turno cada quincena pues se tenían que pagar sin contratiempos las prestaciones de los trabajadores. A lo que se recurría era a solicitar una ampliación presupuestal a la Secretaría de Finanzas para ir tapando ese déficit. “Era la misma historia cada quincena, se tenían asignados 8 mil 350 millones de pesos, pero se requerían mil millones de pesos y no se tenían, por muchas razones”. El problema comenzó cuando se descentralizó el sector salud y se firmó el acuerdo que mandataba la cesión de este servicio a los estados, y se establecía aportaciones de un 70-30 por ciento. Sin embargo, nunca se etiquetaba el porcentaje estatal en el presupuesto. La crisis comenzó a como bola de nieve a partir de que se empezaron a abrir los hospitales comunitarios de Aquila, Tuzantla, Maravatío, Pátzcuaro, La Huacana y Zacapu. “El gobierno te daba para el proyecto y para el equipamiento, pero no te daba para la nómina. Entonces los gobiernos comenzaron a contratar personal en la categoría estatal. Todos esos recursos humanos que eran como 3, mil tampoco estaban presupuestados y a eso le sumas el proceso de dignificación salarial del sexenio pasado que fue darle un buen salario a un número importante de trabajadores que no estuvo en el presupuesto”. A lo anterior, se agrega que en los seis últimos meses del gobierno de Silvano Aureoles Conejo se contrataron a 800 nuevas personas “sin fondeo” y esto acumuló un déficit importante. En números cerrados, el faltante ascendía a los mil 200 millones de pesos. Elías Ibarra recordó que la bienvenida que le dieron al gobierno fue que se tenía que cubrir la aportación estatal con el Instituto de Salud para el Bienestar para el pago de la nómina. “Si el estado no pone su parte, el Insabi no deposita. Entonces se tuvo que pagar lo que correspondía para que fluyeran los recursos”, destacó el también exalcalde de Huetamo, quien garantizó que los trabajadores de la Secretaría de Salud ahora sí reciben lo que está en su cheque y esa es una garantía que no se tenía en el pasado. Aunado a la falta de uniformes y otros pendientes más, que de manera gradual se irán resolviendo. El secretario de Salud reconoció los avances que hubo en materia de infraestructura, pero aclaró que encontraron también unidades en obra negra, o sin equipamiento como ocurrió en La Piedad y Zamora, en donde incluso no había ni licitaciones. Resaltó que este gobierno compró 15 ambulancias con recursos propios, y otras 20 fueron obtenidas a través de la Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública. “Ya hacían falta”. En estos momentos el presupuesto rebasa los 9 mil millones de pesos y “el gobernador le apostó a abatir ese déficit”, compartió Elías Ibarra Torres, tras mencionar que tampoco se les habían pagado las medallas que correspondían a antigüedades de los trabajadores, ni se les cubrieron los bonos COVID-19, que fue un estímulo para los 15 mil trabajadores por la entrega durante la pandemia, entre otras prestaciones añejas. ¿Cuánto encontró en deuda? “Había en tránsito varias deudas y todas siguen. Son como 30 juicios administrativos, sentencias que ya habían dado lo que el marco jurídico aplicaba. Nos dejaron en tránsito cerca de 500 millones de pesos solo en mercantiles con sentencias que agotaron su proceso y causaron efecto como de 500 millones por 30 juicios mercantiles. De esos 30 se pagaron 12. En demandas laborales por laudos son 1 mil 500 demandas laborales de trabajadores que fueron despedidos”. Aunado a esto, también encontraron 400 amparos de ciudadanos que presentaban insuficiencia renal y que demandaban al gobierno de Michoacán los tratamientos sustitutivos. “Entonces, en realidad rondaban entre los 2 mil juicios entre mercantiles, amparos y otros. Son más de 500 millones de pesos en números económicos, aunque ese número exacto lo lleva la Secretaría de Finanzas”, cuantificó el también director de los servicios de salud estatal. ¿Entonces estaba colapsada la Secretaría de Salud? Fue lo que más presumió el gobierno anterior... “Estaba colapsado el sistema de salud. Yo entiendo que hubo grandes avances... Eso no lo podemos dejar de pensarlo. Pero también es cierto que como se venía arrastrando ese déficit y la cobija era la misma, y cuando intentaban cubrir una parte, descobijabas otras partes”. “Hicieron lo que pudieron, sin embargo, yo creo la autoridad en turno debe garantizar el presupuesto en cada dependencia y no se garantizaba en la SSM. Hoy todos los trabajadores tienen prestaciones. Recibimos al último de los sindicatos, y por cierto hemos formalizado a 18 sindicatos en la secretaría con sus aristas y con sus movimientos. Los trabajadores despedidos, las enfermeras que pedían profesionalización, el movimiento...”. ¿Era una bomba de tiempo? “Si no se hubieran tomado las medidas que ya se tomaron se hubiera colapsado el sistema de salud por el déficit y por los conflictos, los pasivos, contingentes y emergentes en deudas. Era muy grande la carga que venía arrastrando la Secretaría de Salud”. Y conflictos.... “Exactamente. Debo agradecer a los sindicatos. No es fácil, cualquier cambio o transición es difícil y se pueden llegar a colapsar las cosas”. ¿Qué va a pasar ahora? Los hospitales pasan a ser administrados por IMSS Bienestar; ¿deja de existir la SSM? “La Secretaría de Salud en el estado y en el país tiene dos funciones. La primera es ser normativa y cabeza de sector y la otra es ser autoridad sanitaria. La Secretaría no desaparece, el secretario no desaparece. Dentro de la Secretaría soy director de los servicios de salud del estado que es el que maneja hospitales, centros de salud, jurisdicciones, campañas de salud, de vacunación, entre otras. Son dos funciones. El Secretario no desaparece. Se formó una buena OPD que es el IMSS Bienestar y es la que se encargará de operar los 22 hospitales que ingresaron”. Aprovechó parar aclarar, pues admitió que esto se puede prestar a confusiones porque está el IMSS de Régimen Ordinario y el programa IMSS Bienestar, y el OPD del IMSS Bienestar, cosas totalmente distintas y cada una tendrá a un representante distinto, pero en el caso de los hospitales transferidos el patrón seguirá siendo la Secretaría de Salud. ¿Cuál es la diferencia entonces? “Se forma este (Organismo Público Descentralizado) OPD qué atenderá de entrada el convenio que ya avanzamos con 22 hospitales. El mes que entra vamos a firmar para los cinco hospitales más que faltan que son el Centro de Oncología, el Hospital Civil, el de la Mujer y Psiquiátrico. También ahí van a tener intereses desde la federación con su junta de gobierno, pero el recurso llega aquí y de aquí se traslada”. En pocas palabras es un prestador de servicios con un espectro aún más amplio. Sí y no es la sustitución del antiguo Seguro Popular. Cuando se creó tenías dos aristas, y la principal es que no atendía al usuario, sino que creaba un catálogo, el llamado CAUSES (Catálogo Universal de Servicios de Salud) donde venían las enfermedades que tenían y las medicinas que cubrían, y hasta ahí. Este nuevo esquema dará la atención médica. “Michoacán tiene 4.2 millones de michoacanos y de esos, 3 millones no tienen seguridad social, no tiene IMSS, ISSSTE, Pemex o Marina. De esos 3 millones la Secretaría de Salud, atendía 2 millones 200 mil. El programa IMSS Bienestar debería atender 1 millón 200 para complementar, pero ese 1.2 millones también lo atendíamos nosotros. Ahora los vamos a atender juntos”, destacó el funcionario estatal. Garantizó que se trabajará coordinados, cada quien en su área, en sus especialidades y para esto ya se firmó el convenio marco. “La misión es que toda la población sin seguridad en salud pueda tener salud y se atienda de manera gratuita. Lo que sigue es que se logre la universalización y más tarde el intercambio de servicios, pero eso será gradual”. ¿Sí hay seguridad de que eso se logre? “Fíjate que veía la declaración de que el IMSS no tiene la capacidad. Pero es que esto no es simple, esto es salud y es otra dependencia. Se suma. Se sumarán todos los esfuerzos de entrada para que los 3 millones 300 mil puedan acceder y tengan cobertura en salud, pero aparte de eso es mejorar equipamiento. Desde que firmamos el convenio marco hace ocho meses ya pudimos acceder a 150 millones de pesos para remodelar, equipar, baños, puertas oídos en 23 hospitales. Solo con haber firmado. ¿Se imaginan ahora?”. Al hablar de la falta de especialistas en Michoacán, el secretario Elías Ibarra compartió que hace unos meses se abrió una convocatoria para contratar a 700 médicos con posgrado, y de esos sólo se lograron 150 nuevos espacios “porque ya no hubo más”. Compartió que en Zitácuaro se requerían, pero ninguno quiso anotarse, y lo mismo ocurre en otras unidades hospitalarias. Ahora, con la firme del acuerdo, se abre la puerta para que además se fortalezca el equipamiento de hospitales. “Este convenio también nos abrió la puerta para 800 médicos generales y 700 enfermeras generales. Cómo no hay médicos especialistas hay que traerlos desde donde sean. Ya llegaron 16 ahorita van a llegar otros 20 la semana que entra. Es como nos vayamos avanzando en los acuerdos. En déficit de especialistas mencionaron que son 400. Cada hospital tiene su particularidad”, expresó el médico. Al hablar de los antecedentes del déficit de especialistas, compartió que lo que ocurrió es que se limitaron los espacios en las facultades. “De los 2 mil que entrabamos antes, salíamos 1300. Al menos 100 hicimos especialidad y 50 hicieron subespecialidad. Ahora, ingresas a la escuela y son 450. Imagínate lo que ocurrió con la acreditación... En lugar de 1300 salen, 300... Es decir, por eso salen mil médicos menos al año. El sistema de salud no estaba preparado para acortar la matrícula de ingresos en salud. Eso lo sufren ahora el IMSS, ISSSTE, y la Secretaría de Salud”. Para el secretario de Salud el pronóstico ahora es mucho más alentador, y se irá fortaleciendo el sistema, con aspiraciones de ser un modelo. “Michoacán puede dar el campanazo”, alentó durante la charla. Largo camino de funcionario Elías Ibarra Torres despacha en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla como secretario de Salud y director de Servicios de Salud. En el gobierno anterior, durante un año también se desempeñó con el mismo rango. Ha sido presidente municipal de Huetamo, su tierra natal, así como diputado local. En el Congreso presidió la Comisión de Salud. Es médico cirujano partero egresado de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Tiene especialidad de Pediatría Médica por la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea, y con un diplomado en Gerencia Social en los Servicios de Salud por la Facultad de Contaduría y Ciencias Administrativas por la Casa de Hidalgo. Su principal encomienda en estos momentos es lograr una tersa transición de los 22 hospitales regionales al Organismo Público Descentralizado del IMSS Bienestar. La Secretaría de Salud no desaparece, y más bien tendrán un trabajo de coordinación.