Ola de calor azota a Michoacán; este martes, en Morelia, hasta 30 grados se prevé

En la capital michoacana, el termómetro ya registró hasta 34 grados en el pasado fin de semana, temperatura que representa un incremento de hasta 3 grados respecto a los registros de los últimos meses.

Foto: Víctor Ramírez

Arturo Molina / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Temperaturas inusualmente altas impactan a prácticamente todas las regiones del estado de Michoacán. Regiones como Uruapan y la Tierra Caliente ya superaron temperaturas de años pasados en una tendencia climática que amenaza con prolongarse durante los próximos meses, aunque tal vez sea Morelia donde es más notorio el aumento del calor.

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En la capital michoacana, el termómetro ya registró hasta 34 grados en el pasado fin de semana, temperatura que representa un incremento de hasta 3 grados respecto a los registros de los últimos meses. El volumen de la plancha de concreto, la falta de áreas verdes y los sistemas anticiclón que han dispersado las nubes durante semanas han convertido a la ciudad en un auténtico “horno”.

Con los indicadores anteriores Morelia se ha acercado a los registros de temperatura de la región de Tierra Caliente, en dónde los termómetros oscilaron entre los 35 y los 40 grados centígrados durante los últimos días y ha sido incluso más cálida que otras regiones que suelen ser más secas, como Apatzingán.

Las temperaturas registradas en Morelia representan las más altas de los últimos cuatro años, ya que desde 2018 no se alcanzaban los 33 grados centígrados; aunque en aquel año fue hasta los meses de mayo y junio.

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Uruapan por su parte, alcanzó hasta los 29 grados durante los últimos días, mientras que otros puntos como las regiones Pátzcuaro y Zamora también se acercaron a los 30 grados al medio día del fin de semana y durante el lunes.

En voz del doctor Cuauhtémoc Sáenz, integrante del Consejo Consultivo de Cambio Climático de Michoacán e investigador de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), tanto las condiciones de sequía como de calor son inusualmente altas a pesar de la temporada.

Refirió que las investigaciones revelan daños a la maleza forestal y vegetal de distintas regiones ante el progresivo incremento de las temperaturas a nivel local, regional y nacional.

Son la falta de lluvia, los bajos niveles de humedad en conjunto con la falta de nubes los que influyeron en que durante los últimos días la sensación térmica de las principales ciudades se dispare.

Lo que estamos viendo es un patrón mundial de clima, le llamamos continental, que es el que ocurre en tierras interiores, no el clima de las costas. En tierras interiores, como en Michoacán, los periodos de sequía son cada vez más secos y mucho más calientes de lo usual”, dijo.

“En el periodo noviembre-mayo las precipitaciones son bajas y cercanas a cero mensualmente pero ahora es demasiado seco. Muy cercano a cero y mucho más caliente y eso lo que está afectando a la vegetación que es lo que estamos viendo", manifestó.

Sobre la sensación de que cada año el calor es más intenso en Morelia, la autoridad ambiental reconoce el aumento en los indicadores de los termómetros que durante esta temporada ya han alcanzado hasta los 34 grados de temperatura.

En voz de Jorge Romero Alvarado, coordinador estatal de Protección Civil, el mayor riesgo con las temperaturas actuales radica en los golpes de calor, sobre todo en los sectores vulnerables.

Un fenómeno crítico que se va a estar dando son los golpes de calor, en donde ya he dado recomendaciones a las 113 coordinaciones para estar muy al pendiente, sobre todo de las personas vulnerables, adultos mayores y niños, que de alguna manera no los expongan a rayos del sol y tengan adecuada hidratación", manifestó.

El crecimiento de la plancha de concreto es un factor determinante en Morelia. La desaparición de las áreas verdes, de los árboles en las vías públicas y la falta de pulmones en la ciudad han incidido en un aumento en la temperatura.

El aumento de la temperatura corresponde al menos a un grado sostenido en los últimos años, el cual representa un desequilibrio ambiental y de sensación térmica importante para la población moreliana.

La última medición en cuanto a la temperatura de la entidad evidenció un aumento de 0.8 grados centígrados respecto a la media histórica, temperatura que se mantuvo estable entre 1960 y 1990.

Especialistas advirtieron que, si bien se observa menos de un grado de temperatura como aumento, el desequilibrio que genera esta variación puede generar desde altas temperaturas hasta inviernos cada vez más fríos en la actualidad.