Javier Favela / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. A prisión irán los padres que obliguen o que presionen a sus hijas menores de 18 años de edad a unirse en matrimonio o en concubinato con persona adulta, según se desprende de iniciativa de la diputada Adriana Hernández, al proponer el delito de cohabitación forzada con penas de 8 a 15 años de cárcel. Si la menor de edad forzada pertenece a alguna comunidad indígena o afromexicana, la pena máxima podría aumentar en un 50 por ciento, es decir, podría llegar a 22 años de prisión para los padres, tutores o “suegros” de la niña o adolescente. De acuerdo con Hernández, en noviembre de 2021, una jovencita de 14 años de edad fue encarcelada en Guerrero por resistirse a contraer matrimonio sin su consentimiento. Anayeli “N” escapó para no ser vendida y casada en 10 mil dólares, pero la policía comunitaria la capturó y la encarceló durante 14 horas. La diputada del PRI advirtió que el matrimonio infantil resulta en el abandono escolar, violencia doméstica y embarazos tempranos. Desde 2019 México derogó el matrimonio entre menores de edad en el Código Civil Federal. Según el INEGI, en 2021 solo hubo 43 matrimonios entre menores en todo el país, en comparación con los 54 mil 138 del año 2012. No obstante, aún se registran casos. Michoacán ha prohibido el matrimonio entre menores de edad por medio de la Ley de los Derechos de Niños y Adolescentes. Sin embargo, algunos funcionarios públicos, como jueces de paz y síndicos municipales, lo avalan de manera encubierta.