Marchas de normalistas son para conmemorar fechas, no por temas pendientes con el gobierno: Mariana Sosa

La directora enfatizó que, a pesar de las movilizaciones recientes, no existen pendientes con estas organizaciones, y reiteró la apertura al diálogo por parte del gobierno del estado

Foto: La Voz de Michoacán.

Juan Bustos / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Mariana Sosa Olmeda, directora del Instituto de Educación Media Superior y Superior del Estado de Michoacán (IEMSySEM), expuso que el diálogo entre las autoridades educativas y las organizaciones normalistas de Michoacán es permanente; sin embargo, esto no inhibe las acciones y movilizaciones que ya se tienen programadas para esta semana.

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La directora enfatizó que, a pesar de las movilizaciones recientes, no existen pendientes con estas organizaciones, y reiteró la apertura al diálogo por parte del gobierno del estado.

Sosa Olmeda destacó la importancia de mantener una comunicación constante con las Normales, señalando que prácticamente todos los días se establece algún tipo de contacto con representantes de estas instituciones. Esta comunicación activa se evidenció en la conversación que mantuvo con estudiantes de Tiripetío la semana pasada.

La directora reconoció que estos días son particularmente complicados, no sólo para las autoridades educativas, sino para todo el estado de Michoacán.

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En esos días se llevan a cabo movilizaciones por diferentes motivos, como la conmemoración del 12 de octubre y la marcha anual de Tiripetío, donde se recuerda un incidente de supuesta represión ocurrido en 2012.

Además, se mencionó la marcha de la Normal Indígena el 16 de octubre. Estas movilizaciones, conocidas como la "Jornada de Lucha", generan cierta tensión en el estado.

Sosa Olmeda fue clara en señalar que estas movilizaciones están relacionadas con fechas específicas en el calendario y no con incumplimiento de acuerdos, falta de pago de becas o problemas relacionados con la alimentación, “estas movilizaciones se dan porque es 15 de octubre, así de sencillo”.

La directora enfatizó que no hay pendientes concretos que pudieran reclamarse en ese momento. Explicó que se habían logrado avances significativos en todas las Normales, incluso en la Normal de Educadoras, que tradicionalmente se mantenía en "días de lucha."

Mariana Sosa además abordó el tema de la solicitud de cambio de directores por parte de los estudiantes, señalando que se evaluaría caso por caso, ya que algunos directores estaban trabajando de manera efectiva y brindando buenos resultados.

La funcionaria también mencionó un acuerdo previo que había sido roto cuando las jóvenes tomaron la Normal en dos ocasiones. Sin embargo, subrayó que este asunto ya se había discutido en detalle en ocasiones anteriores.

La directora concluyó que, más allá de las movilizaciones programadas en el calendario, se estaba trabajando de manera constante y constructiva con las Normales. Reconoció que estos días podían ser complicados, pero enfatizó la importancia de mantener el diálogo abierto y continuo con las organizaciones normalistas.

Cabe recordar que hace 11 años, Michoacán fue escenario de un operativo policial que marcó un capítulo muy sentido en la historia de las escuelas Normales rurales del estado. El desalojo de las escuelas Normales de Cherán, Arteaga y Tiripetío.

El conflicto se originó en el contexto de una protesta estudiantil que había comenzado el 4 de octubre del año anterior. Estudiantes de estas escuelas habían tomado las instalaciones como forma de oposición a la reforma curricular que se estaba implementando en ese momento.

El saldo oficial de dicho operativo incluyó la detención de 176 estudiantes, así como la destrucción de 13 autobuses y vehículos oficiales, así como 10 policías heridos. El enfrentamiento durante el desalojo también dejó estudiantes heridos, aunque no se determinó un número preciso.

En Cherán, más de 800 policías federales y estatales lanzaron bombas lacrimógenas y se enfrentaron a los estudiantes durante casi hora y media para lograr el desalojo. En el desalojo de la normal de Tiripetío, la policía también se encontró con la resistencia de los estudiantes. La operación tomó casi hora y media para controlarse, y tanto estudiantes como policías resultaron con lesiones, principalmente en el rostro y el cuerpo.