Otilia Medellín / La Voz de Michoacán Lázaro Cárdenas, Mich.- Como parte de sus programas de movilidad internacional, el Instituto Tecnológico de Lázaro Cárdenas (ITLAC) recibe a una docena de estudiantes de la Universidad de Cundinamarca en Colombia para participar en el esquema de voluntariado, cumpliendo la premisa de que la educación tiene que ser una formación integral en el desarrollo del ser humano. “La misión de este programa es establecer un campo de aprendizaje basado en la universalidad de conocimientos para proyectar a un profesional en formación, íntegro y capaz de visualizar su contexto con un impacto en la transformación de las comunidades que necesitan ayuda de profesionales en formación para que aprendan e innoven. Además, desarrollar diálogos interculturales donde el saber es fundamental en la expansión y sociabilización del conocimiento multicultural”, explicó el director del ITLAC, Felipe Palomares Sauceda, durante la recepción de los estudiantes colombianos que estarán en Lázaro Cárdenas hasta el próximo 14 de diciembre. El programa de proyecto internacional es una colaboración que tiene el ITLAC con la Universidad de Cundinamarca a fin de llevar a cabo una formación integral de los estudiantes que les permitirá trascender e impactar socialmente en comunidades a las que asistan, precisó en entrevista la jefa del departamento de Gestión Tecnológica del ITLAC, la maestra Gloria Viridiana Vallejo Navarrete, revelando que habrán de visitar próximamente a la comunidad costera El Habillal. La funcionaria educativa detalló que este proyecto busca generar la formación de los estudiantes con mucho enfoque en la innovación y la contribución del cambio en la dinámica social. Provenientes de diferentes ciudades de Colombia se encuentran en Lázaro Cárdenas diez estudiantes de la Universidad de Cundinamarca donde cursan diferentes programas académicos. Los estudiantes coinciden en que tendrán la oportunidad de compartir, además del conocimiento, podrán aportar durante su estadía en este municipio las experiencias y vivencias de su país en diversos temas, en particular en el ámbito social y humano. “La política de atención integral en nuestro país es fundamental desde la primera infancia hasta la vejez de la persona y todos los determinantes sociales que involucran a las mismas. Este voluntariado es la oportunidad para mostrar y traer esa cultura de la Atención Primaria en Salud”, compartió Sonia Ramírez. Precisamente sobre esa posibilidad que se abre a los estudiantes para poder influir, directa o indirectamente, en una comunidad, Verónica Velázquez se refirió al impacto visible que se genera en las personas a partir de la gestión del talento humano dentro de las organizaciones, al igual que en las comunidades. “Esta es una decisión pensada en mi profesionalismo y mi carrera, además de lo que quiero personalmente para mí y mi futuro, siendo esto simplemente una gran bendición y un gran proyecto que es el voluntariado México-Colombia”, respondió Mateo Colorado. Es de mencionar que este es el segundo año en que la Universidad de Cundinamarca y el ITLAC, a través de un proyecto de colaboración, están desarrollando de manera bilateral el voluntariado como parte de un programa de movilidad internacional. “Hemos tenido muchos casos de éxito, hemos tenido un impacto social y trascendente en cada uno de los proyectos en que hemos participado el año anterior como instituciones y también hay un impacto muy importante entre los estudiantes porque se llevan un panorama completamente diferente, una visión y una nueva perspectiva en sus metas”, planteó la Jefa del departamento de gestión tecnológica del ITLAC. Al citar que los sueños se trabajan y se cumplen, la maestra Viridiana Vallejo compartió que los estudiantes colombianos que hoy se encuentran en Lázaro Cárdenas como parte del programa de voluntariado, en algún momento soñaron participar en el mismo y ahora están cumpliendo ese reto. Vallejo Navarrete informó también que los estudiantes del ITLAC que el año pasado participaron en este proyecto ya se encuentran inmersos en otros proyectos igualmente ambiciosos y los cuales surgieron de hacer su voluntariado que desarrollaron durante el pasado mes de julio en las instalaciones de la Universidad de Cundinamarca en Colombia, donde desarrollaron un proyecto con mucho impacto lo que les redituó en un crecimiento personal y profesional. “Cuando ellos regresan a sus lugares de origen, siempre lo decimos, son otras personas porque se transforman al conocer el contexto social de cada uno de los lugares que visitan, al poder convivir y sobre todo al generar una multiculturalidad que les transforma y les hace trascender en su misión académica”, abundó la maestra Viridiana Vallejo.