Jorge Manzo / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán.- El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) identifica hasta ocho grupúsculos, unos numerosos y otros muy reducidos, que agrupan a profesores michoacanos, “todos con capacidad de gestoría y de resolución ante la SEE”, evidenció el presidente de la Comisión Ejecutiva de la Sección 18, Héctor Astudillo García, quien confía que, de ratificarse Alfredo Ramírez como gobernador del estado, replique la buena relación y entendimiento que sostiene Andrés Manuel López Obrador con el ala institucional magisterial. Cara a Cara con los lectores de La Voz de Michoacán, el dirigente sindical reconoció que, al no existir unidad al interior del magisterio, indiscutiblemente será el gobierno de Michoacán y la Secretaría de Educación, los que terminan ganando en este jaloneo. “Al no tener un sindicato con fuerza, entonces nuestras banderas prioritarias, que son la defensa de la escuela y la educación pública, se ven debilitadas, además de que la defensa de los derechos de los trabajadores se ven vulnerados”. Astudillo García compartió que en Michoacán se tiene un mapa político sindical con muchas variantes, pero la mayoría de ellas asentadas en grupos de interés. “La lucha ideológica ha quedado rebasada y ahora tiene que ver más con el poder de la negociación, basada en el diálogo, en la fuerza para lograr resultados o prebendas que beneficien a ciertos grupos de trabajadores”. Al hacer un análisis de las condiciones en las que se encuentra este segmento en el estado, ve a un magisterio dividido y enfrentado. “Ya no solamente es la lucha surgida en el 79 entre la CNTE y el SNTE, sino que ahora es la Coordinadora con todas sus variantes la A, la B, la C, y grupos institucionales que, al no verse reflejados en sus intereses, han decidido caminar de manera paralela a la línea institucional oficial”, reconoció el dirigente del SNTE en Michoacán, tras reconocer que después de que el gremio se abrió a la libre participación, se generaron varios grupos que hicieron planteamientos y que tuvieron eco ante las instancias. “De todos los grupos que existen en Michoacán, sólo uno tiene la toma de nota. Sin embargo, se establecen acuerdos minutados con grupos cuya representación se inscribe en lo política y de entrada a esos acuerdos violentan relaciones entre trabajadores y patrones. Y segundo, viene a mermar el esfuerzo institucional por cuidar las políticas públicas en materia educativa, la relación con los padres de familia, y se generan apartados que tienen que ver con ideas de esos grupos de cómo posicionarse bien”. A pesar de eso, el dirigente sindical afirmó que sí deben existir las minutas entre la organización y el gobierno, pero éste se debe hacer con la representación legal de los trabajadores. Lamentó que en la lucha de los grupos de choque o disidentes normalmente es agresiva contra la parte institucional, sin embargo, afirmó que el SNTE establece una negociación macro y todos los grupos se acogen a los términos de la negociación, incluida la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Astudillo García resaltó que las minutas se deben mantener, porque desde su juicio eso habla de la seriedad de los acuerdos entre ambas partes. Sin embargo, reconoció que lo que le ha sucedido al SNTE es que cuando establecen acuerdos con la autoridad educativa y no hay minuta, los acuerdos no se cumplen. “Es una falta de seriedad de la autoridad educativa, y es por eso que sí es importante que se signen esos acuerdos porque establecemos fechas y tiempos”. Minutas sí, pero no con todos… “No con todos. Porque entonces cuando se establece con otros grupos, hablamos de una minuta de grupos. Y la parte institucional habla de todos los trabajadores en su conjunto (incluidos los disidentes)”. A pesar de las luchas internas, lo que logra el SNTE es para todos “Los grupos disidentes siguen teniendo en Michoacán programas paralelos y que no están cobijados por la política institucional y que viene a lastimar la economía general del magisterio. Si el docente (el SNTE) logra un peso, lo logra para todos. Si un grupo disidente logra un peso para un programa específico, ese programa se aplica para los integrantes del grupo y no para el magisterio. En lo general”. El SNTE qué tan acotado está. El que tiene el control en el estado es la CNTE “La CNTE tiene el poder porque la autoridad educativa le da respuestas que debería de entregarle al SNTE. Cuando hablamos de temas de nuevos ingresos, de ascensos, de promociones, la respuesta debería ser con la parte legalmente reconocida y que esos acuerdos tengan un alcance generalizado. Si la autoridad educativa sigue entregando respuestas parciales, entonces sigue alentando el grupo mismo. ¿Qué le hemos pedido al gobierno del Estado? Que los temas de los trabajadores adentro no se inmiscuyan, son temas de los trabajadores y que resuelvan en base a derecho, que no resuelvan en base a interés político, porque siempre es una tentación para un gobierno querer tener su grupo de maestros para sus intereses, o de gobierno o de partido”. ¿Cuántos grupos sindicalistas del magisterio tienen identificados ustedes? “En Michoacán por lo menos hablamos de 7 u 8, unos muy numerosos, otros muy reducidos, pero todos con capacidad de gestoría y de resolución ante las autoridades de la Secretaría de Educación”. Incluso, algunos grupos con mayor penetración que el mismo SNTE “Más que la penetración, es la circunstancia en que los trabajadores quedan acotados, puesto que al llegar un trabajador institucional a una escuela donde hay una mayoría que no coincide con el docente, ese trabajador se ve obligado a participar. Se ve obligado porque si no, no hay movilidad, si no hay reconocimientos y puede haber… inclusive haber esquemas de represión”. Aún y con todo el poder que ahora tiene la CNTE, también se percibe reducida. ¿Ve mermada la fuerza del sindicalismo magisterial? “Nuestro esfuerzo de los últimos cuatro años ha consistido en reorganizar la presencia institucional para volverle a dar presencia en la agenda institucional, que abarca todos los temas que son exactamente los mismos y que tienen en la Coordinadora A, la coordinadora B, Coordinadora C, el grupo institucional A, el B, el C. Lo que sucede que cuando llegamos con un tema específico, por decir eventuales, resulta que existen los eventuales institucionales y los eventuales de la coordinadora y los eventuales de otros grupos y la autoridad, en lugar de darle una respuesta uniforme, da respuestas parciales. ¿Por qué? Porque alimenta que esos grupos sigan existiendo”. ¿El futuro para el magisterio para el próximo gobierno? “Con el próximo gobierno habremos de establecer los mecanismos de buscar una sólida relación institucional, estamos a la espera de que las autoridades electorales resuelvan el tema particular de Michoacán, pero una vez que esto se determine, nuestra ruta será de plena fortaleza con el gobierno entrante, con la autoridad educativa que se determine y con una agenda muy específica que habrá de atender la problemática de los trabajadores. Sin etiquetas, sin exclusiones y sin señalamientos. Más que la sola aplicación del derecho”. ¿Tiene la fuerza el SNTE para acordar una agenda bilateral con el próximo gobierno? “El gran reto por venir se llama unidad. Es un tema que nos va a ocupar a todos, porque hace dos años el sindicato, a través de su figura institucional, que se llama Consejo Nacional, determinó que precisamente para fortalecer la unidad en los Estados y fortalecer la figura de los dirigentes, ahora estos van a ser nombrados por voto directo y secreto de todos los trabajadores. Entonces esa acción va a implicar la suma de compromisos, el construir acuerdos que permitan un comité de unidad. La figura que represento, la Comisión Ejecutiva, es de tránsito, pero ya aprobó el nombrar a las directivas por voto directo. Si nos vamos al esquema que estamos ahorita en Michoacán, nadie tiene mayoría porque hay un porcentaje por lo menos del 30% de compañeros que no tienen una definición firme porque quedan atrapados en los intereses o porque están sujetos a la resolución de sus problemas. Hoy tendremos que construir propuestas creíbles para que, independientemente del gobierno que entre, el SNTE se mantenga como la voz rectora en los temas del sindicato y presente al Gobierno una agenda que vea para el pueblo en general y para los trabajadores en lo particular”. El sindicalismo en estos momentos más que apostarle a una agenda educativa, va por el tema de las prebendas “El Comité Ejecutivo Nacional en una política institucional cobijada por todo el país el maestro Alfonso Cepeda, ha planteado el renglón de volver al origen, al origen de nuestro sindicato, que es la defensa de la escuela y la educación pública y la defensa de los derechos de los trabajadores. No podría existir una sin la otra. Nuestra materia de trabajo en la escuela pública, escuela que se cierra atenta contra una fuente de empleo, plaza que se cancela, atenta contra una adecuada atención a la educación de los niños. El sindicato ha planteado desde toda su vida que la educación pública debe verse como política de Estado, de Estado mexicano, para que independientemente del gobernante o del partido, las políticas públicas en materia educativa no se toquen. Que no llegue un dirigente a modo grupos a modo y la agenda educativa se vea trastocada porque el dirigente logró reunir a una equis cantidad y la agenda se tuvo que desviar”. Sin embargo, eso es idealista. La atención está en otro lado “En Michoacán sí, en el resto del país afortunadamente no. Si hablamos de la Coordinadora en su gran presencia la podemos reducir a cuatro bastiones emblemáticos, que es Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán. En el resto de los estados sí hay una presencia, pero sólo representativa de la CNTE, pero no mayoritaria, hay estados donde se agrupan 80 mil trabajadores en una sección y los compañeros que militan a la CNTE no llegan ni al 5%. Por lo tanto, el reto de Michoacán es mayúsculo. Al trabajar por la unidad tenemos que privilegiar estas dos grandes líneas de trabajo para evitar que el derecho de los niños, a una educación de calidad quede atrapado por intereses políticos de los trabajadores y que los derechos de los trabajadores no queden supeditados a un escalafón político que tiene que ver con el interés de los dirigentes”. ¿Cuál es el perfil que debe reunir el próximo secretario de Educación Estatal? “Nosotros le apostamos a que el próximo secretario de Educación sea un gran negociador, que escuche a los trabajadores, que entienda que los trabajadores de la educación no son sus empleados. Somos trabajadores al servicio del Estado. Subrayo del Estado mexicano, porque luego detrás de un escritorio se dictan políticas públicas en materia educativa. Sin escuchar a los trabajadores y los trabajadores tienen una representación legal y los trabajadores tienen una representación legítima, que son dos conceptos. El próximo secretario de Educación confiamos que reúne el perfil del diálogo permanente y la negociación seria, firme y sostenida para escuchar sí a todos los grupos, pero también a la sociedad, a los padres de familia, a los propios alumnos, y que entonces ese eslogan de muchos gobiernos sea una realidad. La educación pública a salvo de cualquier interés político”. ¿De concretarse el triunfo de Alfredo Ramírez Bedolla, quién se empodera? “El sindicato, desde su origen, ha acompañado la tarea institucional del Presidente de la República en turno. Hoy el CNTE ha encontrado un gran apoyo, un gran eco, en el señor presidente Andrés Manuel López Obrador, y ha sido respetuoso no solamente de las formas y métodos del SNTE, sino que ha recogido propuestas del sindicato que tiene que ver con demandas añejas que habían dejado de ser atendidas. Por ejemplo, en este sexenio se ha logrado más de 400 mil basificaciones, que es el título de propiedad de la plaza, y eso lo hemos recibido del presidente”. ¿Se replicaría en Michoacán una relación como ésta? “Confiamos en que debe darse la ratificación del próximo gobernante y que este sea con las siglas de ese partido, la relación fortalezca las demandas institucionales”.