Juan Bustos / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Durante este mismo mes de diciembre arrancará la construcción de la línea de conducción de aguas tratadas de Morelia para su distribución a módulos de riego de los municipios de Charo, Álvaro Obregón e Indaparapeo. Lo anterior fue informado ayer por el gobernador de Michoacán Alfredo Ramírez Bedolla, luego de dar a conocer que ya fue emitido el fallo del proceso de licitación de la obra pública, el pasado 14 de diciembre. El mandatario estatal enfatizó que la infraestructura comprende una línea de conducción de dos tuberías de 19.3 kilómetros cada una, para llevar aguas saneadas de la planta de tratamiento de la tenencia de Atapaneo, en Morelia, a zonas de riego de los módulos II, III y IV, así como del Distrito 020. Agregó el titular del Ejecutivo estatal que esta obra permitirá aprovechar un volumen anual de 37.84 millones de metros cúbicos (Mm3) de agua saneada para 3 mil 650 hectáreas de superficie agrícola. Ramírez Bedolla refirió que el suministro de la presa de Cointzio para el Distrito de Riego 020 es de 47.7 Mm3 al año y de 19.8 Mm3 para Morelia, por lo que con la nueva infraestructura se liberarán 30.4 Mm3 para uso urbano; “esto representaría una reducción significativa del 65.6 por ciento en el volumen de agua concesionada para Morelia y con ello, la recuperación paulatina de los mantos acuíferos”. La autoridad estatal ha destacado que es de gran relevancia este proyecto de infraestructura para reutilizar en zonas de cultivo las aguas saneadas de la planta de tratamiento de aguas residuales de la tenencia de Atapaneo, del municipio de Morelia. El gobernador reiteró que la idea es construir una línea de conducción y red de distribución de aguas tratadas para enviarlas a los módulos de riego II, III y IV del Distrito de Riego 020, que contempla a los municipios de Álvaro Obregón, Charo e Indaparapeo, y con ello detonar y mejorar las actividades productivas del campo en esta región. Los módulos de riego dependen de este sistema para el riego de cultivos. A inicios de mes, la alcaldía de Álvaro Obregón manifestó había tenido una importante sequía a lo largo del año y dificultades técnicas para aprovechar sistemas de riego; la afectación alcanzó al 30 por ciento en los cultivos, e impactó en especial a los pequeños productores. La autoridad local ponderó que sería de gran utilidad para los agricultores locales este proyecto de redistribución de las aguas tratadas. “Este esfuerzo se enmarca en la necesidad de establecer un sistema de intercambio de agua que involucra a la presa de Cointzio, la planta de tratamiento de aguas residuales de Atapaneo y el Distrito de Riego 020”, expuso el mandatario. Además del tema agrícola, ponderó, Ramírez Bedolla la relevancia medioambiental que la obra reviste; el mandatario destacó la importancia de intercambiar agua entre la presa de Cointzio, la planta de tratamiento de aguas residuales de Atapaneo y el Distrito de Riego 020, debido a que los módulos de riego, aprovechan las aguas de dicha presa, a través del río Grande (al que se le incorporan aguas negras y aguas saneadas de Atapaneo) para cultivo de maíz, sorgo, alfalfa, avena, garbanza y trigo.