Juan Bustos / La Voz de Michaocán Morelia, Michoacán. En el proceso de legalización de la marihuana, se tiene que contemplar un plan integral para que su producto ayude a las comunidades rurales a su desarrollo, pero cuidar que el proceso sea agroecológico, en términos de conservación del medios ambiente, en una industria que podrá ponerse a funcionar a partir del 2022 a través de las reformas constitucionales. La anterior reflexión como parte del foro denominado Regulación de Cannabis: Necesidad social urgente rumbo al 4/20, dicho Foro organizado por la senadora Blanca Piña, en el marco de la discusión en torno a la legalización. Luis Barrios, especialista e impulsor de la legalización para la comercialización de la marihuana, subrayó que se requiere fijarse en las comunidades rurales, en términos del impulso su desarrollo través del cultivo de la Cannabis. A manera de contexto durante el Foro, indicó que la próxima fecha decisiva en torno al tema de la Cannbis, es el 30 de abril de 2020 fecha que se otorgo para agotar el procedimiento legislativos en torno a la Ley que regular la marihuana al Senado de la República por parte de la Suprema Corte de Justicia. Es el desmitificar y desestigmatizar el uso del cannabis, el principal objetivo de las organizaciones. Explicó que a partir de que se den condiciones para este tema y los nuevos lineamientos para Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), es que se podrá avanzar en lo que plantea el actual dictamen para establecer el consumo de cananbis. El activista indicó que uno de los temas necesarios para el tema tiene que ver con la producción desde las comunidades rurales uno de los principales aspectos tiene que ver con el numero de hectáreas cultivadas. Hay personas que llegan y nos dicen quiero sembrar 200 hectáreas, pero es un tema que tenemos que revisar en torno a las necesidades que existen”, dijo. Explicó que por ejemplo, 140 millones de kilogramos lo que se requeriría México para darle una dosis de 90 gramos diaria a cada mexicano, esto implicaría le cultivo de 26 mil hectáreas, pero si se toma como referencia los que tiene seguridad social solo se requerirían 10 mil 600 hectárea. Explicó que por lo cual la regulación tiene que con el número de hectáreas cultivadas, pero a esto se le añade un reto importante, “el desafío es que cantidad se otorgara las comunidades para el cultivo, pero también como se realizara su producción “. Subrayó que la siembra del cannabis tiene que darse desde una perspectiva agroecológica y alejarse de los modelos de otros cultivos que han sido nocivos para las comunidades y para la tierra, “en las comunidades se tiene todos los elementos para el cultivo; México importan más de 75 por ciento de los fertilizantes que pueden nocivos”. Explicó que frente al plazo del 30 de abril 2020 y que coincide con la fecha asociada al movimiento canábico el 4/20, se vuelve necesario que se llegue con un debate informado con base en la ciencia en torno a los alcances y la producción. Un elemento importante por ejemplo el proyecto de dictamen contempla el establecimiento de dispensarios donde se distribuirá la cannbis, pero esto nosotros creemos que podemos cambiarle el nombre y volverlo un centro integral de atención en termino de que puede ser más amplia la atención, si es para uso recreativo o medicinal y poder ofrecer tratamientos en este sentido”, dijo. Foto: AP. En California, EUA, ya hay viveroa techadoa de cannabis. Reiteró que en el tema de la producción es un tema prioritario en términos de lograr que las comunidades tengan las mejores condiciones para la producción en términos de que tambien signifique que llegue los recursos a las comunidades. Explicó que el proyecto del gobierno federal se plantea el apoyo de un fideicomiso que es un instrumento positivo en términos de transparencia del manejo de los recursos, “las comunidades obtendrán los recursos a través de este mecanismo que tendrán que recuperar y que su vez servir para otros. Apuntó que desde la sociedad civil y de productores, Plan Nacional de Desarrollo de la Industria Regenerativa de Cannabis que plantea este enfoque agroecológico integrado por cuatro aspectos como el ecológico, económico, político y sociocultural El activista subrayó la importancia de los foros para concientizar en torno a estos temas y la necesidad de avanzar en una proyecto que ayude a la sociedad y no reproduzca relaciones nocivas a la hora de la producción y consumo del cannabis y en cambio se aprovechen sus propiedades.