Para hacer frente a la sequía, la Sader entra al quite en protección de cultivos del estado

Ante la vulnerabilidad a la que se enfrentan los productores de todas las regiones del estado, urgen mecanismos que doten de certidumbre y confianza a los pequeños propietarios de la tierra

Arturo Molina / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Con base a las condiciones de sequía extrema que atraviesan decenas de municipios michoacanos, a partir de este mes la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) del estado de Michoacán pondrá en marcha una inversión complementaria a la adquisición de una póliza de aseguramiento a pequeños productores agrícolas.

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El objetivo es claro: ante la vulnerabilidad a la que se enfrentan los productores de todas las regiones del estado, urgen mecanismos que doten de certidumbre y confianza a los pequeños propietarios de la tierra.

Los cultivos de temporal y riego, como maíz en sus ciclos de primavera y verano, serán los que participarán hasta en una superficie de 3 hectáreas por productor, tendrán un apoyo con una suma asegurada de hasta 29 mil 766 pesos por riesgos climatológicos y biológicos al maíz de temporal y hasta 50 mil pesos en maíz de riego.

El único requisito será que el productor tendrá que aportar una parte del costo del seguro, mientras que el gobierno de Michoacán, a través de la Sader fungirá como garante y mediador para que se cumplan los pagos en caso de ser necesario el cobro de los seguros por daños agrícolas.

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El programa perteneciente a la Dirección de Agricultura de la Subsecretaría de Fomento Productivo señala que, en caso de sequía, la indemnización del siniestro se aplica hasta en un 30 por ciento de participación de pérdidas que se descontará al monto indemnizable, mientras que exceso de humedad, heladas, bajas temperaturas, inundaciones, granizo, incendios, huracán, vientos fuertes, onda cálida y plagas están contempladas al 100 por ciento.

Si bien en este mes de abril el mayor riesgo por daños a cultivos se estima por las condiciones de sequía, por lo general la mayor cantidad de pérdidas en los últimos años los concentran las lluvias con fenómenos como inundaciones, las heladas de fin de año e incluso las granizadas en el caso de las zonas más elevadas.

En cuanto a las plagas, se refiere que el pulgón amarillo, la mosca de la fruta y otros insectos siguen representando daños para miles de hectáreas que hasta este año habían quedado fuera de los programas de contención a los daños catastróficos.

El productor deberá acudir con el representante delegacional de la Sader en la zona o bien con el técnico Agrosano municipal, con una solicitud única de participación, identificación oficial vigente, comprobante de domicilio, una copia de su documento que acredite como propietario del predio y su Registro Federal de Contribuyente, mientas que los requisitos para el fondo de aseguramiento indica que es necesaria la constancia de aseguramiento que especifique la georreferencia del predio en al menos cuatro puntos, además de estar en el padrón de participantes.

Desde 2020, el Seguro por Daños Catastróficos había permanecido suspendido mientras se analizaban las irregularidades y malos manejos detectados en el uso de los recursos. Hasta el tercer mes de este 2023 no se han registrado pérdidas por las altas temperaturas y el creciente espectro de sequía que cubre prácticamente el 100 por ciento del territorio estatal. Desde principios del mes de marzo trascendió que las presas ya se encuentran a menos del 70 por ciento de su capacidad mientras que incrementaron de manera vertiginosa la cantidad de agua bombeada a los sistemas de riego.

No obstante, aun con lo anterior el incremento de los indicadores anormales que alcanzan hasta la sequía extrema sigue generando preocupación para los productores de todas las regiones del estado.

El pronóstico sigue siendo reservado. Actualmente se espera que el fenómeno de “La Niña” se debilite hasta el mes de abril y finalmente para mayo y junio comiencen las lluvias. No obstante, se prevé una disminución de hasta un 25 por ciento en los niveles de precipitación para la primera fase.

Año con año Michoacán registra miles de millones de pesos en pérdidas económicas por la sequía, lluvias torrenciales, inundaciones, plagas y otros fenómenos para los cuales, no existe contención.

El Seguro Catastrófico, programa que llegó a proteger de factores de riesgo hasta 900 mil hectáreas de cultivos durante 2018, actividades acuícolas y hasta pequeñas embarcaciones, este año dejó de existir por la falta de inversión de recurso federal. Debido al retiro de fondos federales concurrentes en años pasados para la protección de los cultivos, desde mayo del 2020 y hasta la fecha no existe seguro alguno que proteja a los agricultores.