Con 21 mil casos pendientes, Junta Local de Conciliación y Arbitraje sufre saturación

Debido a la alta carga de pendientes, la JLCA ya no recibe denuncias y avoca sus esfuerzos en liberar todos los pendientes antes de que termine 2025

Foto: Samuel Herrera Jr., La Voz de Michoacán.

Juan Bustos / La Voz de Michoacán

Gabriela Manzo Ortiz, presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) en Michoacán, ha informado que actualmente se encuentran en trámite alrededor de 21 mil procedimientos laborales en colaboración con las juntas foráneas de la entidad. El objetivo es finalizar todos estos procesos para antes de que concluya el año 2025.

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En charla con La Voz de Michoacán, Gabriela Manzo Ortiz recordó que, con la entrada la reforma laboral aprobada en 2021 y puesta en vigor en Michoacán en octubre del año pasado, las juntas de conciliación ya no reciben nuevos casos de diferencias laborales, lo que implica el cierre de la ventanilla. Sin embargo, reconoce que aún llegan personas en busca de orientación y son dirigidas a los nuevos centros de conciliación en donde, en teoría, se soluciona de manera mucho más mediata.

A pesar de la amplia carga de trabajo, la presidenta de la JLCA resaltó que están trabajando arduamente para cumplir con la meta establecida por el gobernador de concluir todos los asuntos pendientes antes de que terminen su vida útil las juntas. Con el propósito de agilizar el proceso, se ha incrementado tanto el número de audiencias como de resoluciones. También se ha implementado una jornada de conciliación estatal que opera permanentemente de lunes a viernes, de una a tres de la tarde.

Durante esta jornada, trabajadores y patrones son invitados a participar en mesas de conciliación para lograr acuerdos mutuamente beneficiosos y resolver los procedimientos de manera más expedita.

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La funcionaria explicó que, en términos numéricos, se desahogan aproximadamente entre 500 y 600 audiencias cada semana en todas las juntas, incluyendo las foráneas. “Aunque existe presión para atender estos casos, se está acelerando el ritmo de trabajo con el fin de satisfacer las expectativas de la ciudadanía”, manifestó.

Manzo Ortiz aclaró que, aunque actualmente la ventanilla está cerrada para nuevos procedimientos, los trabajadores que llegan buscando ayuda son orientados hacia los centros estatales de conciliación para que puedan iniciar sus procesos allí.

Reiteró que, a pesar de este cierre, la Junta Local de Conciliación y Arbitraje en Michoacán está comprometida a abordar el cúmulo de casos pendientes, con un enfoque particular en los procedimientos individuales.

En relación con las estrategias jurídicas que podrían ralentizar el proceso, la presidenta de la JLCA admitió que existen vías de recursos y amparos que podrían retrasar los procedimientos en varios de los casos. A pesar de estos obstáculos, el equipo de la junta está trabajando para programar audiencias de manera rápida y eficiente, y a pesar de los desafíos, los resultados están siendo positivos.

En cuanto a la plantilla de personal, se cuenta con cerca de 150 colaboradores para destrabar el rezago acumulado. Aunque el reto es grande y la carga de trabajo considerable, se están gestionando recursos para contratar más personal y enfrentar los desafíos venideros, detalló.

Indicó que la meta establecida para la conclusión de estos procedimientos es el año 2025, y a pesar de su magnitud, el compromiso y esfuerzo por parte de la junta son evidentes. “Aun con los retos se sigue trabajando para alcanzar los resultados esperados”, afirmó.

Reforma aboga por respuesta inmediata

En relación a la reciente reforma laboral, es de resaltar que ésta se enfoca en dos aspectos clave: la libre sindicalización y la agilización de la justicia laboral. La reforma busca asegurar el respeto a la libre sindicalización a través de votaciones personales, libres, directas y secretas de los trabajadores. Además, introduce medidas para lograr una justicia laboral pronta y eficaz, confiando en la intervención de centros de conciliación y juzgados laborales.

Respecto a la agilización de la justicia laboral, la reforma tiene como objetivo eliminar la prolongación excesiva de los juicios laborales. Se ha establecido un período de 45 días para concluir los juicios laborales, lo que representa una mejora significativa en términos de eficiencia. En el ámbito de los tribunales, también se busca reducir el tiempo necesario para resolver casos.

La conciliación adquiere una importancia considerable en esta reforma. Se destaca que aproximadamente el 70 por ciento de los conflictos en materia individual pueden ser resueltos a través de procesos de conciliación. Esta medida no solo contribuye a aligerar la carga de los tribunales, sino que también permite a las partes involucradas llegar a acuerdos más rápidos y satisfactorios.