Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Desde el 21 de marzo que el coronavirus llegó a Michoacán, se lograron acotar los tiempos de contagio, un ejemplo es que en la entidad se tardó 50 días en sumar 50 caso, sin embargo, al reiniciar la reapertura de las actividades económicas y sociales, mucha gente no lo tomó con la advertencia de que sería gradual y “no se contuvo relajando las medidas de prevención”, señaló este lunes el gobernador Silvano Aureoles y advirtió de la cantidad de contagios diarios que se reportan en el estado. “Hoy en Michoacán han muerto 279 personas y hemos llegado a más de 3.500 contagios, de los cuales más de 1.300 se presentaron en los últimos 13 días, esa cifra indica que tenemos como promedio 100 contagiados al día”, aseveró. Dijo que el pasado 9 de junio se rompió el récord de trasmisiones al registrar en un solo día 203 casos, sin embargo, señaló que hay personas que siguen sin creer en el virus, pero no “en Michoacán se están muriendo uno de cada 10 contagiados confirmados”. Señaló que en las últimas dos semanas la movilidad se ha incrementado hasta un 75 por ciento. Respecto a Lázaro Cárdenas, epicentro de la pandemia en el estado, dijo que ese tan solo municipio registra más contagios que 8 estados de la República y por si fuera poco en las últimas 2 semanas se ha registrado la misma cantidad de muertes en las que hubo en los primeros dos meses de la epidemia. “Si la gente de Lázaro Cárdenas, de nuestro puerto, no asume la responsabilidad de continuar cumpliendo las medidas sanitarias, no podremos evitar que sigan muriendo más personas”. Al cumplirse las dos primeras semanas de la nueva convivencia en Michoacán, el mensaje es directo y claro: la epidemia no se ha ido y la responsabilidad de morir o de que pierdas a un ser querido son mas altas que nunca”. Destacó que sólo este fin de semana se clausuraron 21 negocios en Apatzingán por no cumplir con las medidas sanitarias y las reglas establecidas para la reapertura gradual y progresiva de las actividades económicas y sociales. Además, se tuvo que evitar la realización de partidos de futbol, jaripeos fiestas y otras actividades que implican una congregación masiva en diversas comunidades.