Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Condición de sequía creció de manera exponencial en los últimos tres meses en Michoacán; al menos 64 municipios presentan condiciones de sequía moderada y severa. A días de que inicie oficialmente la temporada de lluvias, el fenómeno sigue expandiéndose por todas las regiones del estado. El último corte del Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) advirtió condiciones de lluvias por debajo del promedio en la región occidente y pacífico Sur, en dónde se encuentra enclavado el estado de Michoacán. Si bien el norte y sur del país han registrado lluvias ligeramente por encima de lo normal, en el centro y occidente la situación es distinta. Prácticamente todo el estado se encuentra afectado de manera anormal por la sequía o al menos condiciones anormalmente secas durante los primeros cinco meses de este año. Asimismo, solo el 8.6 por ciento del estado se reporta sin afectación por las altas temperaturas y la ausencia de lluvias. En números reales, 47 municipios ostentan indicadores de anormalmente secas; 36 municipios en sequía moderada y 28 distritos en condición de sequía severa. Al menos en el estado de Michoacán, los rubros de sequía extrema y sequía excepcional se encuentran en ceros. A nivel nacional se advierte una condición similar. 856 municipios fueron ubicados en condición de sequía, 752 en anormalmente seco y 855 territorios sin afectación. A nivel de cuencas, la región Lerma-Santiago-Pacifico es una de las más afectadas. La zona que cubre casi la mitad de Michoacán registró 25 por ciento de sequía moderada, 44.8 por ciento de sequía severa y 17.5 por ciento de sequía extrema. Lo anterior, se ha visto reflejado en los niveles de almacenamiento y demanda de las presas y lagos de la región. La cuenca del Balsas también se encuentra seriamente afectada. 52.5 por ciento registró condiciones anormalmente secas, 30.6 por ciento de sequía moderada, 12.3 de sequía severa y 4.6 por ciento de sequía extrema. Ambas regiones hidrológicas han registrado valores tenientes a la sequía desde hace al menos 50 años y alcanzaron los niveles más altos entre el 2019 y el 2020 cuando los valores de precipitaciones no alcanzado el mínimo para la recuperación de las presas, lagos y zonas de recargas. Foto: Archivo, EFE Las altas temperaturas, la demanda de consumo de agua tanto para uso urbano como agrícola han sometido a un importante estrés hídrico a las 24 presas del estado de Michoacán. La última actualización revela que se encuentran por debajo del 50 por ciento en promedio general de almacenamiento. Entre las presas que registran los valores más bajos se encuentra la presa del Tercer Mundo de Senguio; la Presa Tepuxtepec en Contepec; la Presa Malpais en Querendaro; la Presa Jiquilpan en Copándaro; la presa del Bosque en Zitácuaro y los Olivos en Tepalctepec. Se espera que sea hasta el mes de julio cuando se establezcan los sistemas de lluvia que permitan revertir los indicadores de sequía al menos en el corto plazo. No obstante, desde hace al menos 50 años, Michoacán se mantiene en condición constante de sequía, principalmente por la modificación de los suelos y otros efectos del cambio climático. La condición de este año no es mejor respecto al inicio del 2021 pasado. El Monitor de Sequía reveló en el primer bimestre que hasta 100 municipios michoacanos presentaban un alto grado de sequía. Cabe destacar que a pesar del respiro que dieron las precipitaciones del año pasado a las presas del estado, las condiciones de lluvia siguen sin recuperarse. La captación de agua en la cuenca del norte del estado de Michoacán apenas alcanzó un 50 por ciento de la media histórica en cuanto a lluvias se refiere. De los 950 milímetros que se esperaban para toda la temporada apenas cayeron 500 para las últimas semanas de la temporada. En años pasados, la condición de sequía ha cubierto hasta el 90 por ciento del territorio Michoacano, lo que incluso derivó en crisis de abasto de agua en los distritos de riego de prácticamente todas las zonas del territorio estatal. Zonas del bajío y la tierra caliente tuvieron que limitar sus actividades agrícolas como medida se contención dictada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).