Otilia Medellín / La Voz de Michoacán Lázaro Cárdenas, Michoacán. La reducción de la afluencia turística por la pandemia de la COVID-19 y los recortes presupuestales al medio ambiente, son los principales factores por los cuales los campamentos tortugueros de la costa michoacana enfrentan una de las peores crisis económicas de los últimos años. A pesar de que la costa de Michoacán es lugar de anidación de varias especies de tortuga marina, lugar que reconocen por haber nacido en alguna de las playas estatales a las que regresan para depositar sus huevos, milagro de la naturaleza que es custodiado por hombres y mujeres que de manera voluntaria dedican su tiempo para la protección del quelonio, los recursos siguen sin llegar. Foto: El Habillal Se quejan que solo en el caso de Lázaro Cárdenas, no están trabajando u operan a niveles reducidos, los recintos Solera de Agua y Chuquiapan, mientras que el resto se mantienen a la espera de que lleguen los apoyos que prometió el Gobierno del estado. El arranque de actividades del Programa de Protección y Conservación de la Tortuga Marina 2022-2023 tuvo su arranque oficial hace tres meses, fue el 6 de mayo, en la localidad de Maruata, del municipio de Aquila, donde se anunció que se apoyaría con 3 millones de pesos las acciones de preservación que realizan los campamentos tortugueros por parte de las comunidades indígenas y por voluntarios, en la región Costa del estado. En Lázaro Cárdenas son 10 los centros de protección de la tortuga marina que están distribuidos en diversas playas estos son: Perla del Pacifico, Tortuga, Barra de Pichi, Taracosta, El Habillal AC, El Centenario. Solera de Agua, Las Peñas, Boca Seca y Chuquiapan. Foto: Campamento tortuguero El Centenario Los integrantes de los centros de protección de la tortuga marina que son reconocidos por las autoridades ambientales de los tres niveles de gobierno han comenzado desde hace varios días con la búsqueda y ubicación de los nidos naturales para recuperar los huevos que han depositado las tortugas adultas que tras cumplir con este ciclo natural regresan al mar. Los hombres y las mujeres dedicados a la actividad mencionada también son conocidos como campamenteros, ya que los lugares de anidación, conservación y liberación son comúnmente denominados campamentos tortugueros. Desde el mes de mayo arrancaron las labores de limpieza de los campamentos tortugueros donde se adecúan zonas para sembrar los huevos recuperados de los nidos naturales y cuidarlos hasta el nacimiento de las tortugas y posteriormente liberarlos al mar. Foto: Campamento tortuguero El Centenario La actividad se realiza para proteger a las tortugas que son una especie en peligro por diversos depredadores naturales incluyendo en los ataques a los seres humanos que realizan esta práctica, aunque está penado que se transporte, venda o consuma tortuga, así como sus huevos. En junio comenzaron reportes de arribazón de tortugas y para mediados de julio aumentó su presencia en las playas de Lázaro Cárdenas, por lo que a la fecha ya hay varios nidos sembrados en los campamentos tortugueros. A la fecha ya se registraron nacimientos de tortugas, por lo que ya en algunos campamentos se ha realizado la liberación de crías de la especie golfina. El caso más reciente ocurrió en el campamento “El Centenario” que se encuentra en Las Calabazas y cuyos cuidadores protegieron los huevos y acercaron al mar a 190 crías resguardándolas de depredadores. Foto: Campamento tortuguero El Centenario Hay gran productividad por las y los voluntarios para resguardar a la tortuga y así lo demuestra el que tan solo en una noche, la del jueves, se recuperaron mil huevos de tortuga golfina de nidos naturales y fueron trasladados para su resguardo al campamento tortuguero Taracosta. Con esa cifra como promedio es de estimar la buena labor que se realiza en los centros de protección donde se está a la espera de nuevos nacimientos como es el caso del campamento tortuguero El Habillal que tiene resguardados 157 nidos estimando que será a partir del próximo 15 de agosto cuando comiencen las liberaciones. En la temporada anterior fueron varios los campamentos que sufrieron graves daños, tanto por el llamado mar de tormenta, asociado con el paso de la tormenta tropical “Dolores” y los huracanes “Enrique” y “Nora”, causando daños severos a la franja playera de este municipio. La mayor pérdida fueron los huevos sembrados, por lo que las cifras de liberación de tortugas marinas disminuyeron severamente, al 15 de diciembre del 2021, con datos oficiales se habían liberado 720 mil crías cuando en el 2020 el registro de la temporada fue de un millón 24 mil tortugas liberadas. Los campamenteros siguen a la espera de los apoyos comprometidos en mayo pasado por las autoridades, pero siguen trabajando para recuperar el número de crías liberadas durante la temporada de este 2022.
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