Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Con la apuesta de colocar medidores de dióxido de carbono (CO2) en los establecimientos, la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) y la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) presentaron a la iniciativa privada una nueva propuesta para tener un control más óptimo de los riesgos de contagio en los locales comerciales, así como minimizar la posibilidad de aplicación de cierres intermitentes. La medida posibilitaría a los negocios volver a tener actividad los fines de semana, mientras que los bares podrían mantener sus puertas abiertas hasta las 11:00 de la noche, si bien se mantendrían revisiones en el tema de la sana distancia (1.5 metros entre personas y/o mesas), la prohibición de fiestas concurridas y un aforo no mayor al 50% en los locales, aunque serían los mismos dispositivos medidores de dióxido de carbono los que marcarían la pauta. La propuesta será analizada por los comités Estatal de Seguridad en Salud y Municipal de Salud, toda vez que buscan homologar las medidas en todo el territorio estatal. Se prevé que sesionen los días jueves y viernes de esta misma semana, como parte de la ruta para transitar hacia lo que la autoridad estatal denominada “Cambio de paradigma en los espacios seguros”, por lo que este fin de semana podría haber más información sobre cómo se avanzaría en la propuesta, toda vez que son más de 230 mil comercios y habría que hacer un diagnóstico sobre aquellos que necesitarían emplear estos dispositivos. El objetivo, señaló Jesús Melgoza, titular de la Sedeco, es buscar caminos para impulsar una efectiva reactivación económica en Michoacán mientras al mismo tiempo se mantiene una tendencia positiva en cuanto a la contención de casos de COVID-19. LAS VENTAJAS Instalar un medidor de dióxido de carbono o un medidor de CO2 en el aire permite controlar de forma efectiva la calidad del aire y, por tanto, repercutir en el bienestar y la salud de las personas. Es una solución que mejora el bienestar dentro del hogar y ofrece una mayor tranquilidad a trabajadores y clientes en un negocio. Así, contar con un sensor medidor de CO2 ofrece las siguientes ventajas: Mide y comprueba el CO2 en el ambiente.Ayuda a saber cuándo ventilar un espacio interior.Reduce el posible tiempo de exposición al COVID-19.Ayuda a purificar y filtrar el aire.Genera un aviso antes de que se produzcan valores excesivos.Permite encender la ventilación mediante un relé. MÁS VENTILACIÓN, LA CLAVE Sin duda la utilización de dispositivos para supervisar niveles de dióxido de carbono en el ambiente sugiere la mayor innovación entre los protocolos que se han venido implementando desde hace un año. La medición del CO2, de acuerdo con los expertos, permite conocer el nivel de concentración de aerosoles y es particularmente útil en espacios cerrados. La premisa es que mientras más aire ingrese del exterior, mientras mejor ventilación haya, se disminuyen notablemente los riesgos de contagios. El dióxido de carbono es un gas que se emite al momento de respirar, y la acumulación del mismo puede colaborara que también se aglomeren mi-cropartículas de gotículas respiratorias que se suelen denominar ‘aerosoles’. En el exterior la concentración del CO2 ronda las 400 partes por millón (ppm). Un estudio realizado el año pasado por la Universidad de Taipei, en Taiwán, reveló que después de mejorar la ventilación del plantel se logró contener un brote de COVID-19 al interior del mismo. Se determinó que el nivel alcanzado de 600 ppm fue vital para detener las infecciones y esta medida se ha utilizado como denominador común en los espacios donde han colocado los dispositivos para medir el CO2. Un indicador mayor sugiere que es necesario ventilar e incluso la necesidad de que gente salga del lugar para ‘limpiar’ el aire. Cabe destacar que la Secretaría de Salud de Michoacán aún no da a conocer cuál sería el índice máximo de partículas por millón permitido en los comercios de la entidad, sin embargo, sí dejó en claro que habría una revisión exhaustiva y programada de estos aparatos para vigilar que se res-pete la normativa, tal como lo han hecho los Guardianes de la Salud con el tema de horarios y aforos. Diana Carpio insistió en la necesidad de implementar estosd ispositivos; estos aparatos se encuentran en el mercado en precios que van desde los 700 y hasta los 3 mil 500 pesos, dependiendo de la marca y algunas funciones adicionales como timbre de alerta.