Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. A pesar del despliegue de los recursos como el Fortapaz, así como de otros apoyos para la seguridad pública, los municipios siguen desdeñando las mesas de coordinación, seguridad y justicia. Los órganos integrados por ciudadanos, representantes de los tres niveles de gobierno y especialistas en la materia, rara vez cuentan con la participación de todos los ediles o al menos, los titulares de seguridad municipal. En voz de Roberto Ramírez Delgado, presidente de la Fundación Ciudadana Para el Desarrollo Integral de Michoacán (FUCIDIM), lo anterior también se traduce en un rezago en las estructuras de seguridad pública de las demarcaciones. Las buenas prácticas no se difunden y los modelos como en el caso de justicia cívica pasan prácticamente desapercibidos para el resto de las demarcaciones. La implicación dela falta de participación de los municipios evidencia que poco se llega a conocer en las mesas de la situación que prevalece en las demarcaciones. Si bien se revisan las cifras oficiales de incidencia delictiva el análisis, discusión y comparación de las cifras son puntos neurálgicos en las tareas de seguridad. A pesar de que prácticamente todas las corporaciones municipales cuentan con deficiencias en la cantidad y calidad de sus elementos, menos de 30 por ciento de las demarcaciones asisten a las reuniones, lo cual ya derivó en preocupación por parte de los representantes de la sociedad civil. “Muy poco, la verdad. Por decir, en la de la ciudad de Morelia de los 14 municipios, van unos 4 o 5 municipios. Eso es malo porque las buenas prácticas no se escuchan. Lamentablemente la lentitud con la que los municipios michoacanos están adoptando los juzgados cívicos es muy corta. Solo 5 municipios están destinando recursos para crear sus sistemas de justicia cívica”, acusó el también activista y especialista. Y es que los principales responsables de la seguridad son los municipios, no obstante, carecen hasta en un 70 por ciento de los policías necesarios para atender los fenómenos delincuenciales, así como la prevención del delito. A lo anterior, ni siquiera municipios como la capital del estado se salvan. El artículo 115 constitucional es enfático en que es responsabilidad de los municipios el hacer frente a los problemas de inseguridad y garantizar la integridad de los ciudadanos de cada una de las demarcaciones. En el caso de la Mesa Regional de Morelia se ha evidenciado que los municipios dentro de la zona metropolitana, como son Charo, Tarímbaro, Acuitzio, Cuitzeo y las zonas aledañas, no cuentan ni con el estado de fuerza ni con los elementos certificados necesarios, lo cual impacta directamente a la estrategia en Morelia. Se estima que principalmente las ciudades se enfrentan a los mismos fenómenos como en el caso de la puerta giratoria de la que gozan los delincuentes, quienes son arrestados y posteriormente son liberados en repetidas ocasiones, situación que va en detrimento de la estabilidad de la seguridad de miles de personas. Otro de los aspectos que revelan la grave descoordinación refiere a la regionalización. Si bien el estado de Michoacán aceptó dividir en 13 sectores todo el territorio, la federación mantiene otros criterios de división que complican el panorama en cuanto a la atención. “La subdivisión que se hizo es un acierto en 13 regiones, para tener menos municipios encada región. Es un número más manejable. Nos falta que la federación adopte está regionalización porque ellos ven en una sola región a Morelia y Uruapan. Deberían cambiar el criterio. Es algo que está pendiente y necesitamos ver que haya una buena estrategia”, explicó Ramírez Delgado a pregunta expresa de esta casa editorial. “En lo que refiere al tema delos indicadores de violencia, el representante de FUCIDIM reconoció que si bien los Homicidios disminuyeron en los últimos meses a diferencia de años pasados, la contención del fenómeno debe seguir siendo prioridad para la administración de Alfredo Ramírez Bedolla frente al gobierno del estado de Michoacán. “En el tema de Homicidios seguimos estando complicados, en algunas regiones más que otras, en Zamora, en Morelia que pues muchos de los delitos van con delincuencia organizada y esa parte copete a una parte más estrecha. Van mejorando, no lo que quisiéramos. El Fortapaz es una gran noticia”, concluyó.