Roberto Huitrón / La Voz de Michoacán Los Reyes, Michoacán. El padre del niño agredido por otro menor en la guardería Montessori Trilingüe, de Los Reyes, presentó denuncia ante la Fiscalía General del Estado. Por su parte, la directora de la institución, Dafne Haly Vázquez, señala que sí tiene documentos que avalen su trabajo, pero argumenta que debido a los sellos de clausura le ha sido imposible sacarlos del edificio. En redes sociales, Dafne Haly Vázquez Torres, directora de la estancia infantil que desde el pasado lunes 16 de los presentes se encuentra con los sellos de clausura, ha fijado su postura en torno a la nota publicada en este medio, como el señalamiento de Ávila Yépez de que esta instancia es clandestina al no tener ningún permiso ni autorización para operar. La directora explica que en el municipio de Peribán, donde al parecer tuvo una estancia infantil, estaba absolutamente registrada y contaba con todos los permisos, pero en el caso de Los Reyes, reconoce que se carecía de los registros para poder operar una institución de este tipo, pues acababa de mudarse y no sabría si tendría éxito. Vázquez Torres dice estar, “cansada, esto ya se tornó un poco más personal, no sé por qué motivo, quizás mi ex, no tengo idea, ya sospecho de todo mundo…”, refiriéndose a lo publicado por este medio. La directora señala que el motivo del mensaje es para dar “un poquito de contexto” a lo publicado el lunes de esta semana. “Me acaban de enviar el artículo que subieron hacia mi persona, no hacia la estancia infantil, no hacia el problema que me pasó… están diciendo que no estoy estudiada, que no estoy capacitada, mi estancia infantil es clandestina”, refiere. Sin embargo, en lo que Vázquez Torres llama “un poquito de contexto”, no muestra pruebas documentales de su capacitación en el tema educativo o su trabajo con infantes, que es lo señalado en la nota aludida, y menos aún muestra documentos que avalen la correcta prestación del servicio de custodia de menores (bebés), incluso reconoce que no había hecho lo referente a los permisos para operar, ya que dice que “entonces dije voy a ver primero si funciona, pues sentí que no me iba a funcionar”, revela. Además refiere que “me dieron cierto límite de tiempo, pero las cosas se están haciendo muy chuecas y ni siquiera me dejaron entrar a la estancia para enseñar el papel que tengo, que era de un permiso de 3 a 6 meses, no me han dejado sacar los papeles que quiero mostrar, que estoy certificada, todos los papeles los tengo en físico”, agrega que en tanto no tenga los documentos de sus capacitaciones y del permiso, se supone del Ayuntamiento reyesense, “no tengo derecho de réplica”. Denunciar para sentar precedentes: padre del niño Antonio Ávila Yépez, padre del menor de 1 año 5 meses, el cual fue atacado hasta en dos distintas ocasiones en una estancia infantil, ante la pregunta en torno a la decisión de denunciar primero en redes sociales y después ante la Fiscalía del estado, antes de contestar fija su vista en la lejanía, jala aire y expone. “Fue difícil y sólo lo hice luego de agotar una explicación convincente de parte de la directora y que nunca llegó, y luego de constar la falta de seriedad, ética profesional, pero sobre todo el mentir de esta persona, para tratar de evadir su responsabilidad”. Agrega que al iniciar los trámites y gestiones legales de la denuncia penal a quien resulte responsable por el delito de “omisión de cuidado”, aunque no comparte, sí entiende la negativa de varios padres de familia (por lo menos 4 más, cuyos hijos también fueron atacados) debido a que llevar a cabo “un proceso tortuoso, además de exponerse al escarnio social, a pesar de que también hay muchas personas empáticas, “pues te expones a recibir mensajes molestos y hasta amenazantes”. Refiere dos mensajes que le fueron enviados “por dos mamás de la estancia infantil que se sienten ofendidas porque ya no tienen dónde dejar a sus hijas”. Explica que cada vez más está convencido de que este caso de agresión a su bebé sube al escrutinio público un tema importantísimo, que es lo relacionado con el cuidado y defensa de una población de las más vulnerables como es la infantil y que puede marcar el futuro de su desarrollo mental. Explica que no es sólo el caso de su bebé, “felizmente lo hemos atendido tanto en sus lesiones físicas, dándole la atención debida, y sobre todo su salud mental, que no le vaya a dejar marcas y secuelas en el desarrollo de su psiquis y su conducta futura, y sobre todo amor y atención, por lo que vemos grandes mejorías, mi denuncia pública y legal es para que no se vuelvan a presentar situaciones semejantes o por lo menos aceptarlas y que no queden impunes. Lo sucedido en la Guardería ABC no se nos debe olvidar, cero negligencia en la atención en estancias infantiles y guarderías”, concluye.