José Luis Ceja Guerra / La Voz de Michoacán Villamar.-En su afán de regularizar su estatus migratorio en Estados Unidos, mujeres de comunidades de Villamar optan por registrar a sus hijos como de madre soltera pese a tener una pareja, esto con la intención de que su estado civil no sea un impedimento. De acuerdo con Eduardo González Ruiz, exoficial de Registro Civil de la cabecera municipal, esto se trata de un fenómeno social muy común en comunidades con alto grado de migración a los Estados Unidos; de hecho, señaló que durante las semanas previas a las campañas estatales de matrimonios y reconocimiento de hijos que se hace a título de gratuidad, los integrantes de parejas que viven en unión libre se niegan a contraer matrimonio porque esto podría perjudicar los trámites que tienen iniciados para obtener la ciudadanía o la residencia legal en Estados Unidos; de hecho, agregó, hay madres que “prestan jurídicamente” a sus hijos para que algunas personas puedan declarar cargas impositivas en aquel país y se les reintegren recursos por parte del fisco. En el tema del reconocimiento de los hijos, dijo que en ocasiones tanto el padre como la madre deciden registrarlos como sin padre debido a que, presuntamente, esto facilita a los varones poder dar curso a las solicitudes para migrar legalmente a Estados Unidos, aunque, agregó, hay algunas mujeres que también tienen pendiente su trámite y solicitan que los hijos sean registrados como sin padre. Destacó que es en comunidades como El Platanal, Las Zarquillas, Cerrito Colorado y otras en las que se ha detectado con mayor frecuencia este fenómeno, por lo que en la cabecera municipal son pocos los matrimonios que se registran cada año. Destacó que el préstamo o “adopción de hecho” es también una práctica común. Este mecanismo, dijo, permite que algunas parejas que radican legalmente en Estados Unidos registren a menores como propios sin tener ningún lazo de sangre; de esta forma los niños que son registrados en este esquema irregular pueden ser trasladados a la Unión Americana y obtener la ciudadanía. Si bien, dijo, la práctica es a todas luces ilegal, algunos oficiales se ven orillados a aceptarlo ante la presión que ejercen los migrantes, quienes recurren incluso a tácticas fuera del marco ético para lograr sus propósitos; de hecho, en municipalidades con comunidades de amplia vocación rural resulta común que trámites como nacimientos, matrimonios y defunciones no sean tema prioritarios de los comuneros hasta que requieren estos trámites para regularizar su estatus migratorio. Curiosamente, señala, en casos como defunciones, los habitantes de estas comunidades regularmente dejan pasar hasta un semestre entre el fallecimiento del familiar y la solicitud del acta de defunción; esto debido a que en la mayoría de las 43 comunidades que integran el territorio municipal los panteones están operados como una prerrogativa de los jefes de tenencia para fondear las actividades y obras de las comunidades. En lo que respecta al tema de la intención de que las madres registren a sus hijos como sin padre, es un argumento utilizado por la comunidad migrante aunque nunca se ha podido explicar de manera clara cómo es que esto puede ayudar a una mujer a regularizar con mayor facilidad su estatus migratorio.
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