Rogelio Arellano / La Voz de Michoacán Uruapan, Michoacán. La unidad municipal de Protección Civil intensificó procesos de intervención en fachadas de inmuebles abandonados, los cuales, durante la temporada de lluvias, registran un mayor riesgo de derrumbes con peligro para transeúntes y automovilistas, situación que sólo en el centro de la ciudad y calles aledañas involucra unas 30 propiedades. En su mayoría son inmuebles que datan desde el siglo pasado, incluso otros se edificaron poco antes de 1900, los cuales, por indicaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), no deben ser sujetos de remodelaciones que afecten o modifiquen su arquitectura original, lo que no es aceptado por algunos propietarios y optan por el abandono. En este sentido, durante la mañana de este martes, elementos de PC procedieron al retiro de escombro y techumbres de dos viviendas consideradas de alto riesgo por el deterioro en que se encuentran, las cuales se ubican en el cruce de las avenidas Américas y Paseo Lázaro Cárdenas, así como en la calle Artículo 123, entre las calles Libertad y Madero Foto, Rogelio Arellano. De acuerdo con el coordinador municipal de Protección Civil, Roberto Carlos Ávila Pérez, son procesos que incluyen la participación del personal de las secretarías de Urbanismo, así como de Medio Ambiente y el Departamento de Alumbrado Público, pues se trata de un proceso que debe ser integral para no violentar leyes y reglamentos en la materia. El personal de la Secretaría de Urbanismo se encarga de ubicar a los propietarios de dichos inmuebles para informarles del proceso de demolición parcial con carácter de urgente, en tanto que los empleados de la oficina de Medio Ambiente acompañan en la elaboración del dictamen, mientras que Alumbrado Público inspecciona las instalaciones eléctricas o bien garantiza que no sea dañada la red pública. Cualquier inmueble en situación de abandono representa un riesgo que se eleva con el paso del tiempo hasta llegar a situaciones de peligro ante la falta de mantenimiento, sobre todo aquellas propiedades que fueron construidas con muros de adobe y techos de madera con tejas de asbesto, cemento o arcilla. Foto, Rogelio Arellano. Es decir, por efecto de goteras u otros procesos en los que penetra el agua de lluvia a los inmuebles, ocurre el reblandecimiento de estas estructuras al grado de que literalmente se caen en pedazos con mayor actividad durante estas épocas, lo que obliga a la intervención de las autoridades cuando el riesgo se traslada hacia el exterior. El desprendimiento o caída de madera podrida, pedazos de muros de adobe y rocas, así como de tejas hacia la vía pública, son ese riesgo que se busca evitar con estas acciones emergentes a la espera de que los propietarios ejecuten los trabajos de mantenimiento en algunas propiedades o la remodelación en otras que no están protegidas por el INAH. “Existen programas de apoyo para remodelar las casas más antiguas, sin embargo, el exceso de requisitos, combinado con trámites burocráticos ante instancias federales, desaniman a los interesados en conservar la arquitectura original y optan por el abandono total a la espera de que no sea posible el rescate y dar paso a nuevas edificaciones modernas”, señaló por su parte el excoordinador de PC municipal, Alberto Zavala,l y elementos activo de Bomberos Profesionales Añadió que son decenas de inmuebles protegidos por el INAH, sobre todo en el centro de la ciudad y calles aledañas, las cuales en su totalidad, o de manera parcial, sobre todo en sus fachadas, mantienen la arquitectura original, como por ejemplo, portales en su interior, algunas fuentes en los patios y la característica principal de haberse edificado con muros de adobe y tejados de “cuatro aguas” que eran características de aquella época.
La Voz de Michoacán
