VIDEOS | A huevazos, empujones y mentadas termina sesión de Cabildo en Jiquilpan; esta es la crónica

La sesión se celebró para tratar el tema del adeudo que el organismo de agua potable tiene con la CFE por concepto de energía eléctrica

Foto, José Luis Ceja.

José Luis Ceja / La Voz de Michoacán

Jiquilpan, Michoacán. Con agresiones físicas y verbales por parte de los manifestantes para con funcionarios e integrantes de Cabildo concluyó la sesión del colegiado en que se dio marcha atrás a la desincorporación de un bien inmueble para su venta y sufragar el último trimestre de la actual administración en lo que se refiere al gasto de energía eléctrica para los pozos de abastecimiento de agua potable.

PUBLICIDAD

Por acuerdos alcanzados durante la manifestación del pasado miércoles se permitió en la sesión de Cabildo la voz a un grupo de ciudadanos que se autodenominó como representante de la sociedad civil, quienes, en teoría, ofrecerían alternativas para el pago del suministro de energía eléctrica, aunque en la realidad ninguno de ellos lo realizó y las intervenciones, que rayaron en los insultos a los funcionarios y cabildantes, no fueron sino una serie de reclamos alejados del tema a discutir.

La sesión realizada a puerta cerrada fue seguida por los manifestantes a través de pantallas y altavoces colocados al exterior de Palacio Municipal, desde donde se gritaban consignas en demanda de que se permitiera la entrada a la población en general.

Foto, José Luis Ceja.

Entre los puntos tratados por la comitiva de ciudadanos en la sesión de Cabildo se exigió al alcalde la celebración, de manera inmediata, de una nueva sesión en la que los regidores aprobaran la realización de una auditoría, lo que ocurrió minutos después de concluida la sesión extraordinaria convocada para desistir de la desincorporación del patrimonio local.

PUBLICIDAD

Destaca la falta de información que imperaba tanto entre la ciudadanía como entre algunos de los integrantes de Cabildo, ya que, aunque desde el primer momento se dio a conocer que no se trataba de recaudar recursos para el pago de deuda, sino para tener los fondos necesarios y garantizar el pago de la energía eléctrica durante el último trimestre de la administración, algunos regidores y los pobladores que se encontraban al exterior de la sede edilicia mantenían la postura contra el pago de esta presunta deuda.

En el marco de la discusión, Mario Humberto Bustamante Ayala, titular del Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento, explicó que los recursos se requieren no en una sola exhibición, pero sí contar con ellos para pagar mes con mes el gasto de energía eléctrica y entregar el OOAPAS en números negros al final de la administración.

“¡Mangos!”… Crónica del remochín

Los ánimos estaban caldeados, los vecinos de la ciudad, algunos 300, calculó uno de los propios asistentes, se apostaban en el Jardín Zaragoza, otros en los portales del mercado y de la misma presidencia con la vista fija en las pantallas por las que se trasmitía la sesión de Cabildo en la parte alta de la alcaldía; mientras algunos trataban de aguzar el oído otros usaban el micrófono para arengar a la población e insultar a los funcionarios; los insultos de todos colores permearon el ambiente la mañana de este jueves en Jiquilpan.

Terminada la sesión, la comisión de ciudadanos que había sido atendida recomendó no dispersar la multitud hasta que los funcionarios salieran de su lugar de trabajo. “¡Que los revisen, que no se lleven nada!”, “¡Qué salga la tesorera o entramos por ella!”, “¡Sal, Roberto, o entramos por ti!”, eran las frases dictadas por alguien que usaba el micrófono y que fueron seguidas al pie de la letra por los asistentes quienes, como si se tratara de un juego, cercaban las salidas de la alcaldía para agredir a los funcionarios, quienes tuvieron que ser evacuados de la sede a bordo de patrullas bajo una lluvia de huevos y mentadas de madre y con serios intentos de agresión física.

Foto, José Luis Ceja.

Algunos regidores, principalmente los hombres, pudieron salir sin problemas de la alcaldía, no así dos regidoras a las que la multitud siguió por varios metros con continuos insultos. Ellas trataron de correr por la calle Diego José Abad, la muchedumbre las siguió a paso acelerado, las mujeres intentaron llegar a sus vehículos pero era tarde, una de las mujeres que les seguía tomó un mango de un puesto de frutas, que por cierto no pagó, y lo lanzó golpeando a una de las regidoras en la espalda.

Las integrantes de Cabildo tuvieron que refugiarse en un consultorio dental mientras la gente pretendía ingresar tras ellas; los compañeros de los medios de comunicación se interpusieron entre las mujeres y los agresores, mientras la voz en los altavoces del portal de Palacio Municipal azuzaba a la multitud a seguir a las regidoras y no dejarlas; finalmente la policía local tuvo que resguardar a las representantes populares para evacuarlas de ese lugar.

Video, José Luis Ceja.

Los discursos seguían encendidos, proponían actos de vandalismo en los hogares de los integrantes del Ayuntamiento y en los inmuebles propiedad del municipio.

La tensión podía cortarse en el aire y los medios de comunicación, que durante toda la jornada habían sido vistos como aliados por los manifestantes, de pronto eran vistos ya como enemigos por el hecho de haber impedido las agresiones físicas a las regidoras que habían salido por su propio pie de la alcaldía.