Urgen apoyo para mantener el Antiguo Colegio Jesuita de Pátzcuaro y evitar daños en su estructura
Este edificio data de 1585 y piden que sea declarado como Sitio de Memoria Humanística y Confluencia Cultural.


Angélica Ayala / Colaboradora La Voz de Michoacán
Pátzcuaro, Michoacán.- El antiguo colegio Jesuita es uno de los edificios históricos que están dentro del expediente para que sea declarado como Sitio de Memoria Humanística y Confluencia Cultural, es una de las categorías dentro de la designación como Pratrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO; sin embargo, este edificio que data de 1585 cuando iniciaron su construcción, no cuenta con un presupuesto para su mantenimiento. Es la Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum) la dependencia responsable del inmueble, así como de los recursos que le destina, que oscilan entre los 170 mil pesos anuales.
Este inmueble presenta serias deficiencias que podrían poner en riesgo su estructura, aunado a que el presupuesto para actividades culturales tampoco es el más favorable, por lo que, los talleristas deben cobrar una cuota de recuperación para cubrir sus propios gastos, ya que solamente se les presta el espacio.
La extitular del ahora Centro Cultural Antiguo Colegio Jesuita de Pátzcuaro (CCACJP), Sofía Stamatio Contreras, quien por tres años estuvo al frente de este edificio que prácticamente se encontraba en el abandono cultural, reveló en su carta de renuncia las carencias urgentes de atender, al texto señala: “es imprescindible aumentar el presupuesto asignado al CCACJP o bien establecer un esquema de cooperación con organizaciones de la sociedad civil, para garantizar tanto la conservación física del inmueble como la operación óptima del centro cultural”.
Además, informa que en el 2024 solamente el Gobierno del Estado a través de la Secretaría del Cultura destinó solamente 169 mil pesos, “cantidad por demás exigua para atender las necesidades de un recinto de tales magnitudes y relevancia histórica, comunitaria y artística, y que, para comprender en perspectiva, representa menos del 10 por ciento del presupuesto asignado al Centro Cultural Clavijero para el mismo periodo”.
Parte del documento que fue entregado a la Secretaría de Cultura, Stamatio Contreras, revela que “es urgente atender las necesidades de mantenimiento del inmueble (…) la humedad obliga a un mantenimiento permanente, especialmente en su tejado para evitar goteras que remojen el apisonado del techo”, a pesar de los esfuerzos constantes para acomodar las tejas rotas por personal del inmueble y alertar a las áreas responsables de la dependencia estatal, “el estado del tejado en el área oriente (salones de artes plásticas, danza, música y taller de grabado) es grave”, por lo cual recomendó su inmediata atención para evitar mayores daños.
Otras de las necesidades urgentes e imprescindibles son: el escenario de madera del auditorio, los sanitarios de la planta alta, la iluminación de salas de exposición, salones, taller de grabado, y auditorio, así como la infraestructura del taller de cerámica, “todos ellos en pésimas condiciones.
El documento que fue dado a conocer públicamente, también señala que es “crucial que la Secretaría de Cultura garantice los derechos laborales de todas las personas que para ella trabajan”, incluso hay trabajadores con una antigüedad de hace 20 y 12 años, “quienes cada año sufren sobre la incertidumbre sobre la renovación de su contrato, salarios insuficientes y el retraso de su pago durante varios meses”.
Sofía Stamatio, a quien se le ha reconocido por haber impulsado las actividades culturales, abriendo las puertas del recinto los fines de semana que por años permanecía cerrado, así como recibir importantes exposiciones y actividades de carácter internacional, renunció a su cargo teniendo como fecha el 31 de enero, también señala, que a mediados del 2024 se conformó la Orquesta Comunitaria del Jesuita, para ofrecer una formación de calidad dirigida principalmente a niños, niñas y adolescentes, “dicho proyecto no ha recibido recurso público alguno, sosteniéndose únicamente con las cuotas que se les cobran a las madres y padres de familia y con donativos externos. Es necesario reconocerlo como un proyecto prioritario de la Secretaría de Cultura”.
Al no contar con un presupuesto que subsane las necesidades de este inmueble, así como de los talleres que se ofrecen, se tienen que cobrar cuotas, lo que genera “discriminación por condición socioeconómica que cometemos como institución pública al cobrar por los talleres que se ofrecen”, aunque se procuró ofrecer becas a quienes manifestaban no poder pagar el curso, “la cobertura de las mismas recae en las y los docentes quienes a su vez son parte del público prioritario que nos corresponde atender”, por ello también es urgente se cuente con un presupuesto para atender los honorarios de los y las profesoras que brindan los talleres.
En este contexto, la asociación civil Por Pátzcuaro, emitió un comunicado donde también manifiestan su preocupación por la urgente atención que requiere el inmueble y el incremento al presupuesto, denunciando que de acuerdo a los datos obtenidos este se va a reducir de 169 mil pesos a 136 mil pesos para este 2025, “precisamente por la escasez presupuestaria se han acumulado problemas sensibles que demandan urgente atención tanto en lo que hace al mantenimiento del edificio como a requerimientos laborales, de administración y para sostener un programa mínimo razonable de actividades”.
Señalan que una exigencia de la UNESCO, para ser declarado como Sitio de Memoria Humanística y Confluencia Cultural, “es que el edificio cumpla con el criterio de uso congruente, es decir debe contar con un programa de actividades que refleje en función de la candidatura un compromiso con la comunidad, con la preservación de los valores y tradiciones que le dan identidad, con el fomento de actividades que reflejen el carácter de Pátzcuaro, como sitio de memoria histórica y confluencia cultural, y a la vez que sea parte de los cambios que nutre la cohesión social”.
Además, detallan que: “hay el imperativo de que el Gobierno de nuestro Estado provea los recursos que requiere el Antiguo Colegio Jesuita para cumplir consistentemente con su misión; para que mantenga firme su dignidad e integridad como monumento histórico y desarrolle una programación con propósito y calidad. Además, porque ese recinto es uno de los más notorios atractivos para el turismo, actividad de gran peso en la economía de la región”.