Presentan cartel para el Encendido del Fuego Nuevo, que este año será en Erongarícuaro

Angélica Ayala / La Voz de Michoacán

Erongarícuaro, Michoacán. El cartel oficial del Kurhíkuaeri K´uínchekua, “Fuego Nuevo” en castellano, fue dado a conocer por los organizadores de una de las festividades más importantes de los pueblos purépechas de Michoacán. La imagen fue elaborada por la artista plástica Miriam Solorio Guadarrama, originaria de Erongarícuaro, lugar donde este año se realizará la tradicional ceremonia con el encendido del fuego justo a la media noche, cuando la constelación de Orión está en el cenit.

El cartel de Erongarícuaro, informó Martín Mendoza, responsable de la Comisión de Difusión, es una recopilación de elementos que “muestran su historia desde tiempos prehispánicos hasta la actualidad. Al centro se muestra un paisaje del Lago de Pátzcuaro, del cual Erongarícuaro tiene una vista privilegiada con un sol naciente, Tatá Jurhiata. El fuego al centro es la representación de Kurhikuaeri en la tierra, dando la importancia al encendido del Fuego Nuevo que es la ceremonia central de esta celebración”. Explicó que esta narración del significado del cartel fue hecha por su autora Mirian Solorio.

También a través de las redes sociales dieron a conocer el lienzo con los elementos de la cosmovisión purépecha acorde a la celebración: “Erongarícuaro es un pueblo muy antiguo como nos lo demuestra el lienzo de Jucutacato, donde era llamado Tezcatlán, que en náhuatl significa ‘lugar de espejo’. Así mismo, Erhanarikuaro en purépecha significa ‘lugar de espejo’, lo cual cobra sentido ya que se trabajaba la obsidiana tzinapu, siendo ésta un producto de gran importancia tanto en el uso como en la cosmovisión purépecha, simboliza la sangre que proviene del corazón de la Madre Tierra convertida en lava de un volcán”.

El cartel, que si bien representa a cada una de las regiones purépechas que son la Meseta, Cañada de los Once Pueblos, región Lacustre y Ciénega de Zacapu, detalla la celebración en Erongarícuaro. Para ello, los cargueros Kurhíkuaeri K'uínchekua realizaron una invitación a los pintores del pueblo para realizar el cartel representativo de la celebración del Encendido del Fuego Nuevo Año Nuevo P'urhépecha, informó Martín Mendoza.

Los participantes, previo a iniciar sus trabajos, participaron en una conferencia impartida por tata David Linares, quienes les habló de los elementos básicos que debería contener el cartel, “como son la constelación de Orión, el fuego, la obsidiana, que son representación de Kurhíkuaeri; la bandera Purépecha como símbolo de la Unión de Japundarhu isï, pukumindio anapu, eraxamani ka Tsirondarhu. Se mencionó que debía contener elementos prehispánicos y actuales propios de la comunidad”.

De este proceso de selección resultaron ganadores los trabajos de los pintores Álvaro González y nana Miriam Solorio, quien al explicar el cartel que realizó mencionó que, “además de adentrase en el espejo, va más allá de mirarse a sí mismo, es reconocerse y transformarse para mejorar, crecer como persona y entrar en esa espiral de crecimiento personal y en comunidad.

“Las manos a los lados representan el trueque que se realizaba en Erongarícuaro desde hace mucho tiempo, en donde se intercambiaban productos del lago, representados por el pescado, con productos de la tierra, representados por el maíz; recordándonos que Naná Kuerap´eri´, la Madre Tierra, nos provee de alimento. Una mano femenina y otra masculina muestran la dualidad que hay en todos los seres vivos, nos recuerda que para crecer hay que reconocer los talentos de cada una de las partes”.

Al lado izquierdo de la pintura se muestran dos gobernantes de Erongarícuaro, Cuiuva y Quacá, siendo Quacá el último gobernante. Al lado derecho están Irepan y Tanganxoán, quienes vivieron un tiempo en Erongarícuaro, según relata el libro “La Relación de Michoacán”. El chinchorro y la canoa muestran la importancia que en su tiempo tuvo la pesca. En la parte superior se muestran la Danza de Moros, que es de las más antiguas que hay en Erongarícuaro y se baila para la fiesta del 3 de mayo mostrando el sincretismo católico ya que antiguamente se festejaba a T’amu Joskua, cuatro estrellas o cruz de mayo.

Otro de los elementos plasmados en el lienzo es el Judas, un personaje muy representativo del pueblo “tanto para lugareños como para los visitantes que tiene mucho peso en la comunidad. En la parte inferior se plasma el Baile de la Botija, que siempre está presente en las bodas y refleja la responsabilidad de ser padrinos. Y al final se muestra una abuela entregando la bandera purépecha a una niña, recordándonos que tenemos la responsabilidad de transmitir y compartir los conocimientos de medicina tradicional, de costumbres, de tradiciones, de cómo realizar las artesanías de música y sobre todo de los valores tan importantes que tenemos como cultura purépecha para que no se pierdan de generación en generación”.