José Luis Ceja / La Voz de Michoacán Jiquilpan, Michoacán. Al cultivarse prácticamente todos los granos, cereales y legumbres para el consumo humano, la Región Ciénega recibe también una gama indescriptible de productos agroquímicos que la convierten en el ambiente ideal para los riesgos sanitarios de acuerdo al toxicólogo Antonio Rodríguez Valencia. “La Región Ciénega de Chapala es un microambiente en el que se cumplen todos los requisitos como si fuera un micro mundo porque aquí se cultiva prácticamente todo: semillas, hortalizas, frutas y legumbres, y al tener toda esa gama de cultivos que son casi todos, obviamente se aplican también casi todos los agroquímicos existentes”, señaló uno de los únicos tres toxicólogos que existen en Michoacán. Dijo también que, dadas sus características, la región debería fungir a manera de un micro laboratorio o un micro ambiente para un estudio de amplitud y un modelo a seguir por las demás regiones del País porque aquí se cumplen todos los requisitos de exposición y presencia de enfermedades como derivado de la utilización y exposición a este tipo de productos. “Sabemos de la presencia de insuficiencia renal en un nivel muy alto y la insuficiencia renal está muy relacionada con el uso de glifosato y tiene características muy peculiares porque se está presentando más en las zonas en que se establecen los llamados cultivos de hoja larga como el maíz, sorgo y la caña”; en ese sentido, agregó los casos de insuficiencia renal se reducen en la misma medida en que las personas están alejadas de las zonas de cultivo. “En las zonas urbanas en las que la gente está alejada de los campos de cultivo desarrolla otro tipo de patología” dijo y agregó que, a través de la consulta particular se ha establecido ya un incremento considerable en diversos tipos de padecimientos como leucemia, cáncer de mama, linfomas y otras enfermedades a más de cánceres como el infantil; pese a que en su fuero interno el especialista asegura que el incremento en estos padecimientos es derivado del uso de estos productos agroquímicos, lastimosamente en tanto no se tenga la estructura técnica, científica y de personal preparado en cuanto a que haya más presencia de toxicólogos en las diversas áreas, difícilmente podrá hacerse un diagnóstico o implementar medidas de remediación para la problemática que se tiene actualmente. Destacó que la mayoría de los habitantes de esta y otras regiones desconoce los riesgos de salud a los que se enfrenta debido a que desconocen qué productos se utilizan para la producción de alimentos ni el nivel de peligrosidad de los residuos de estos productos en los alimentos “Se está iniciando una plataforma para de ahí desprendernos a diversas directrices que van a depender de la necesidad y del tipo de cultivos y de la aplicación de agroquímicos que se consideren necesarios de acuerdo a los agricultores; no tenemos estadísticas porque no son fiables; hay las estadísticas que tiene la Secretaría de Salud las que, desde mi apreciación personal, distan de una realidad que estamos viviendo todos; la evidencia que tenemos es la que vemos en la consulta, son las enfermedades que se están incrementando y lo que estamos viendo en el día con día”. Destacó que previo a la utilización sistemática de productos agroquímicos las enfermedades, en cuanto a su proporción era diferente “No quiero decir que no hubiera cáncer de mama, próstata o de tiroides hace 30 o 40 años pero era en manifestaciones mínimas” lo que ha ocurrido a raíz de diversos grupos de plaguicidas desde la etapa de los organoclorados que se reflejó en padecimientos de malformaciones congénitas en ciertas especies y hasta la utilización de organofosforados “No quiere decir que fue el único problema, desde ese tiempo se incrementó una gran diversidad de enfermedades; las existentes se incrementaron y otras nuevas aparecieron”. Alertó que con la utilización que se hace ahora del glifosato se ha detectado el incremento del trastorno del espectro autista que se registra ya en los Estados Unidos “Eso es algo que a nosotros nos alarma aparte de la diversidad de cánceres que, curiosamente a pesar de que hay un nexo muy fuerte entre la presencia de glifosato y el trastorno del espectro autista, este todavía no llega a las cortes sin embargo ya hay procesos legales en Estados Unidos de demandas por la presencia del linfoma no Hodgkin que es un tipo de cáncer, pero cuando hablamos de un compuesto, en este caso el agroquímico que es un herbicida que tiene la capacidad de ser un disruptor edócrino y puede incrementar o generar cualquier tipo de enfermedad que esté o no presente y crear una nueva patología”.
La Voz de Michoacán
