Arved Alcántara / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La primavera ha irrumpido, trayendo consigo un aumento notable de las temperaturas, lo cual conlleva una serie de precauciones cruciales para todos, especialmente para aquellas personas que enfrentan condiciones y enfermedades crónicas como la diabetes. De acuerdo con las proyecciones del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se anticipan cinco periodos de calor intenso entre marzo y junio, con temperaturas superiores a los 40 grados Celsius en varias regiones incluyendo Michoacán, mientras que en ciudades como Morelia y Uruapan se espera que los termómetros alcancen entre 30 y 35 grados Celsius, lo que resalta la necesidad de tomar medidas adicionales para salvaguardar la salud. El doctor David Chávez, especialista en endoscopía gastrointestinal y jefe médico de Cardio-Metabolismo de Novo Nordisk, ha subrayado la importancia de la atención especializada para las personas que viven con diabetes durante esta época del año. Explicó que los pacientes que padecen esta enfermedad del tipo 1 y tipo 2 son más propensos a experimentar molestias relacionadas con el calor, ya que ciertas complicaciones, como el daño a los vasos sanguíneos y a los nervios pueden interferir con la capacidad del cuerpo para regular la temperatura y aumentar el riesgo de golpes de calor y deshidratación. El especialista médico alertó sobre el impacto potencial de las altas temperaturas en la acción de la insulina en el organismo, lo que hace imperativo que los pacientes supervisen regularmente sus niveles de glucosa en sangre y ajusten su tratamiento, incluyendo la dosis de insulina y la dieta, bajo la supervisión de un profesional de la salud. Además, durante los periodos de calor intenso tanto la población en general como los grupos vulnerables, como los niños, los adultos mayores y las personas con enfermedades crónicas, enfrentan un mayor riesgo de contraer infecciones gastrointestinales, urinarias y fúngicas, lo que puede desencadenar complicaciones diabéticas que requieren atención médica inmediata. Ante este contexto, el doctor David Chávez compartió una serie de recomendaciones fundamentales para el cuidado de la diabetes durante esta temporada, éstas incluyen mantener una hidratación adecuada (tomar agua y sueros), medir los niveles de azúcar en la sangre con regularidad, almacenar los medicamentos y suministros en lugares frescos, utilizar ropa ligera y de colores claros, protegerse del sol con sombreros y gafas de sol, evitar la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día, aplicar filtro solar en la piel en caso de salir y mantener una comunicación estrecha con el médico tratante. En lo que respecta a la actividad física, esencial para el control de la diabetes, se recomienda realizarla durante las horas más frescas del día, preferiblemente por la mañana temprano o al atardecer, especialmente si se lleva a cabo al aire libre. Aquellos que opten por hacer ejercicio en espacios cerrados, como los gimnasios, deben asegurarse de que estén debidamente climatizados para evitar complicaciones relacionadas con el calor y una mayor fatiga. “Esto puede causar golpes de calor que se convierten en emergencias médicas. Además, las personas con diabetes se deshidratan con mayor rapidez; no tomar suficientes líquidos puede elevar el azúcar en la sangre, lo que causa que tengan mayor necesidad de orinar y de esta manera se deshidrate”, abundó. El doctor Chávez advirtió sobre los riesgos asociados con el consumo de bebidas energéticas o deportivas, que pueden contener cafeína y contribuir a la deshidratación y al aumento de los niveles de azúcar en la sangre. Recomendó a los pacientes que verifiquen sus niveles de azúcar antes y después de realizar ejercicio físico y que informen a su médico si es necesario ajustar su tratamiento en esta temporada. En el caso de los viajeros, el especialista en Endoscopía Gastrointestinal destacó la importancia de mantener la insulina y otros medicamentos en una nevera portátil para protegerlos del calor extremo. También hizo hincapié en la importancia de seguir el plan de tratamiento prescrito por el médico, que puede incluir opciones farmacológicas como los agonistas del receptor de GLP-1 y las insulinas de acción ultra prolongada. “Es importante mencionar que vivir con diabetes no es una limitante para disfrutar la vida y la temporada de primavera-verano, siempre y cuando las personas tomen una serie de medidas para un cuidado especial”, indicó, si bien es importante tener cuidado al respecto y seguimiento al padecimiento. David Chávez concluyó enfatizando que el médico es la persona más adecuada para prescribir el tratamiento óptimo para cada paciente, teniendo en cuenta su estado de salud individual y su estilo de vida. Instó a todos los pacientes a seguir las indicaciones de su médico y a buscar atención médica profesional en caso de cualquier preocupación o emergencia relacionada con su condición diabética.