Desmienten supuesta vacuna contra COVID-19 de la UMSNH

Contrario a lo que se presumió en la anterior gestión de la UMSNH, la vacuna en la que se trabajó fue un esfuerzo en colectivo y no un proyecto propio.

Foto: EFE

Juan Bustos / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Desmintieron versiones de la supuesta vacuna que en exclusiva estaba desarrollando la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) para combatir la enfermedad del coronavirus (COVID-19).

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En torno al desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 que en la anterior administración se presumió por parte de las autoridades universitarias, la rectora Yarabí Ávila González aclaró que no es un tema de investigación propio de la Casa de Hidalgo, sino de un convenio en el que participaban investigadores, y aunque se colaboraba en el proyecto, no era propio de la institución.

“Hubo un malentendido, no es bueno colgarnos de cuestiones que no le corresponden, aunque sean logros, debemos ser honestos y éticos; participaba la universidad, pero no era proyecto propio, sino en colaboración”, indicó.

La rectora indicó que el tema de la Universidad Michoacana era un convenio donde participaban maestros, “pero no era un proyecto propio, sino colaboración, es importante revisar convenios”, y al momento no tiene más información al respecto.

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Contrario a lo vertido por el exrector Raúl Cárdenas, nunca existió entonces este desarrollo local de la vacuna, y la misma investigación ni siquiera hubiera sido costeable con los presupuestos deficitarios que cada año enfrenta la institución nicolaita.


Mentiras y exageraciones

Es importante señalar que la última información que se tuvo en torno al desarrollo de la vacuna se dio cuando la UMSNH dio a conocer que ante la nueva variante del SARS-CoV-2, denominada ómicron, por el diseño de la misma no tendría problemas para ser efectiva.

En su momento, Alejandro Bravo Patiño, profesor, investigador y titular del Centro Multidisciplinario de Estudios en Biotecnología de la UMSNH, que formaba parte del equipo de trabajo de la Universidad Michoacana que desarrolla la vacuna de mosaico contra el virus que produce la enfermedad conocida como la COVID-19, detalló que al momento la información de la nueva cepa es acotada, si bien se sabe que podría contener hasta 50 mutaciones y que condensa las mutaciones de todas las variantes conocidas.

El propio investigador había señalado que el desarrollo, costeado únicamente con recurso de la UMSNH, se encontraba en la fase 2, que consiste en pruebas en animales. En la fase 3 se experimentaría con humanos y estimaba que en octubre 2021 debió quedar finalizado el prototipo de esta vacuna mexicana y michoacana.

Asimismo, en abril de 2021, la institución presumió que el ahora exrector de UMSNH, Raúl Cárdenas Navarro, presentó ante el coordinador de Asesores de la Presidencia de la República, Lázaro Cárdenas Batel, los avances de la investigación sobre la vacuna contra el COVID-19, la cual desarrollan investigadores y estudiantes nicolaitas desde el inicio de la pandemia.

En la reunión de aquel momento, el entonces rector indicó que la vacuna era desarrollada de manera exclusiva por la Universidad Michoacana está diseñada con una recombinante de tipo mosaico, lo que permitiría adaptarla a otras mutaciones o variantes del virus, con el objetivo de que no pierda eficacia en la protección. Y, además, busca la producción de interferones para potenciar el efecto protector con la inducción de linfocitos T que eliminen células donde se esté replicando el virus dentro del organismo de la persona.

Asimismo, Cárdenas Navarro le aseguró a Lázaro Cárdenas Batel, asesor de la Presidencia de la República, que la Universidad Michoacana desarrollaba el prototipo de los biosensores en coordinación con el Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Electroquímica (CIDETEQ) para diagnóstico de COVID-19.


Revisan irregularidades en plazas

Las plazas irregulares heredadas por el rectorado de Raúl Cárdenas Navarro y que están a revisión por parte de la Universidad Michoacana tienen un costo de 100 millones de pesos, reveló la rectora de la institución nicolaita, Yarabí Ávila González, quien además manifestó ya se están reinstalando también a los trabajadores académicos que fueron despedidos indebidamente durante la anterior administración.

Yarabí Ávila ha informado sobre las irregularidades encontradas en las plazas laborales de la institución, en donde se beneficiaron a familias, amigos y gente cercana del exrector y sus funcionarios más allegados, como el extesorero Rodrigo Gómez Monje. Según los datos presentados, aún se encuentran en revisión 150 plazas por posibles irregularidades, y se estima que el costo anual de las plazas asignadas de manera incorrecta es de 100 millones de pesos.