Héctor Jiménez / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Michoacán vivió otro trimestre negro para las mujeres en este arranque del 2021, ya que de enero a marzo se registraron oficialmente 61 homicidios dolosos sobre este sector poblacional, así como seis feminicidios, lo que da un total de 67 michoacanas que fueron asesinadas en estos tres primeros meses del año, generando un promedio de más de 22 casos de mujeres muriendo bajo condiciones violentas cada mes. El reporte “Información sobre violencia contra las mujeres” publicado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) enumera que Michoacán es el quinto estado del país con mayor número de “presuntas víctimas de mujeres de homicidio doloso” al contar 61 hechos bajo esta tipificación hasta el cierre de marzo. Por delante se ubican el Estado de México con 67 casos, Guanajuato con 69, Chihuahua con 75 y Baja California con 99. En contraste, Michoacán se encuentra exactamente en el punto medio de las estadísticas nacionales de feminicidio, pues se posicionó en el puesto número 16 de las 32 entidades federativas, al registrar solamente seis hechos de este tipo hasta el pasado mes de marzo. A su vez, la plataforma Semáforo Delictivo junto con los datos del SESNSP refleja que uno de los feminicidios corresponde al municipio de Uruapan en marzo pasado, dos tuvieron lugar en Pátzcuaro y Morelia en febrero, mientras que el primero del año se registró en Chucándiro en enero. Los dos casos restantes no fueron encontrados en los tabuladores. El total es de 67 mujeres asesinadas en Michoacán durante este primer trimestre del 2021. Es importante recordar que, hasta el corte de información del pasado mes de febrero, se tenía un conteo de 38 mujeres asesinadas, 35 bajo homicidio doloso y tres por feminicidio. Esto implica que en marzo se confirmaron 26 nuevos homicidios dolosos de mujeres y tres feminicidios en el mes, marcando así las peores cifras en la materia a pesar de coincidir con el ocho de marzo, en el que las mujeres cumplieron otra jornada de actividades con las que demandaron un alto a la violencia. Las estadísticas además reflejan un promedio de 22 mujeres asesinadas en Michoacán al mes. En lo que respecta a feminicidios, este año se ha dado un nuevo fenómeno, ya que anteriormente la mayoría de hechos se habían concentrado en Morelia, pero en lo que va del 2021 los seis casos han radicado cada uno en diferentes municipios de la geografía michoacana. Atrapadas por el narcotráfico Alrededor de las anteriores cifras, organizaciones civiles señalan que hasta un 60 por ciento de los homicidios registrados en Michoacán tienen algún grado de relación con el crimen organizado y el narcotráfico. En el caso de las mujeres, se trata de un fenómeno en el que se ven atrapadas entre la falta de oportunidades de las comunidades en las que viven y la desaparición de apoyos del gobierno federal, que las lleva a unirse a actividades delincuenciales ya sea de forma voluntaria u obligada. “Muchos de los casos sí tienen un asunto donde las mujeres sí fueron asesinadas por el crimen organizado. Hemos visto algunos casos, platicado con algunas personas que no quieren hablar porque la familia tenía un involucramiento con el crimen organizado. Cuando está esto, muchas veces no participa la familia y los procesos de investigación se vuelven más complejos”, afirmó Circe López Riofrío directora de la asociación civil “Humanas Sin Violencia”. De forma similar, ante el repunte de inseguridad iniciado en 2019 en la capital michoacana, María Concepción Torres Zaragoza, directora del Instituto Municipal de las Mujeres para la Igualdad Sustantiva (Imujeris) de Morelia, había advertido que dichas dinámicas de inseguridad terminan por alcanzar a las mujeres. “Efectivamente, cuando hay un aumento de violencia en lo general, social, y que ahorita sabemos que se está dando por este pleito entre grupos organizados, también hay un aumento de violencia hacia las mujeres, o sea que no nos escapamos. No dudo que efectivamente el dato en cuanto a número sea grave, siempre se han dado situaciones de violencia sexual”, explicaba la funcionaria en torno al aumento de casos de violación. Tanto López Riofrío como otras activistas coinciden al afirmar que no es prioridad de ningún gobierno actualmente eliminar las diferentes formas de violencia contra la mujer “La seguridad de las mujeres sigue sin ser prioridad para ningún gobierno, que yo me atrevería a decirlo, que no es un problema de este municipio, es un problema de estructura, aún todavía no está atendido como debería ser”, expresó Ana Luisa Barajas Pérez, integrante del Equipo de Mujeres en Acción Solidaria. “No es una prioridad para el país ni para el gobierno y estamos preocupadas. Hay un recorte fuerte y eso impacta a los estados”, añadió López Riofrío en cuanto a la desaparición de programas de apoyo a las mujeres en medio de la contingencia sanitaria en la que aumentaron los casos de violencia.
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