Arturo Molina/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Ante la necesidad impulsar el aprovechamiento de los servicios ambientales, tales como la práctica silvícola del estado y la generación de agua potable que incluso podría ser exportada a otros estados vecinos con carencia del recurso, el autoridades estatales y federales desplegarán recursos para apoyar la reconversión de terrenos agrícolas en predios forestales. Se trata de un proyecto que ya ha iniciado en el oriente del estado en los municipios de Ocampo, Hidalgo y Zitácuaro, en donde los aprovechamientos maderables, la producción, procesamiento de resina y la sustentabilidad de la actividad han rendido ya frutos de manera importante. La intención es que Michoacán recupere el primer lugar a nivel nacional tanto en la producción maderable, resinas y otros servicios ambientales que además de dejar creces en materia económica, representan una mejora significativa para el medio ambiente y su conservación. El reto es complejo. Años de deforestación, incendios forestales y cambio de uso de suelo impulsados por la instalación de monocultivos de gran valor comercial como el aguacate y las berries generaron que en sólo diez años, la producción maderable bajara en un 50 por ciento, es decir, de un millón de metros cúbicos. La práctica silvícola se redujo a solo 500 mil metros cúbicos en menos de una década, lo que implicó una pérdida de al menos cien mil empleos.