Arturo Molina/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Con base a las evidentes afectaciones ambientales que se han generado en zonas agrícolas y boscosas de Michoacán, por el uso indiscriminado y no regulado de cañones antigranizo, autoridades de los tres niveles de Gobierno sesionarán en la Mesa de Seguridad Ambiental, en donde se definirá la ruta a seguir respecto a esta práctica y sus presuntas consecuencias. La denuncia de agricultores y pobladores del Sur de Morelia, Acuitzio del Canje, Villamadero y Huiramba es contundente; el uso de estos dispositivos que buscan erradicar las lluvias torrenciales y el granizo para proteger los cultivos, están ahuyentando por completo las precipitaciones y con ello, afectando seriamente a los cultivos de temporada. Datos de la Procuraduría Ambiental de Michoacán (PROAM), revelan que se tienen identificados al menos 5 cañones antigranizo en la parte sur de Morelia en la colindancia con Acuitzio del Canje, Villamadero y Tacámbaro. La dependencia aseguró, estos dispositivos operan sin permiso al igual como otros dispositivos que fueron ubicados en años pasados en otras regiones. El cañón antigranizo es un dispositivo usado para prevenir la formación de tormentas de granizo. Emite ondas de choque que se desplazan a la velocidad del sonido e interfieren en la cristalización de hielo. Según datos científicos, cuando las nubes cargadas de granizo o agua se acercan al aparato se acciona, por la acción de las ondas de choque y el gas acetileno, el granizo desciende en forma de nieve o agua. Si bien los cañones antigranizo pueden contar con autorización de la Secretaría de Medio Ambiente Cambio Climático y Desarrollo Territorial (SEMACCDET) para su operación, deben de cumplir con especificaciones en cuanto a la altura y cantidad de gas con el que operan. No obstante, a decir de Juan Carlos Vega Solórzano, titular de la PROAM, la dificultad para ubicar los cañones y para acceder a ellos, les ha impedido conocer en qué condiciones operan. En entrevista para La Voz de Michoacán, el procurador ambiental aseguró que la preocupación de los agricultores se encuentra latente, sobre todo porque en estas regiones el comportamiento de las lluvias ha sido diferente a otras partes del estado, en donde las precipitaciones han superado incluso la media histórica. Sólo de 2009 al 2014, la PROAM realizó 20 actuaciones en contra del uso de cañones antigranizo. Actualmente, uno de los puntos que más preocupa se encuentra al sur de Morelia, en el ejido de Loma Caliente. Estamos trabajando con los ejidatarios para verificar el actuar de los cañones antigranizo. La comunidad manifiesta descontento porque el uso de esta tecnología, le atribuyen a la ausencia de lluvias en la región. Estamos en una época donde las lluvias se manifiestan en zonas de la comunidad y la comunidad está preocupada. Hicimos un recorrido e identificamos 5 lugares donde se presumía y encontró a uno en el sur de Morelia en la comunidad de Loma Caliente. Es importante, que la PROAM, apegado al marco legal tenemos la facultad de verificación la función de los cañones en la generación de ruido y daño ambiental”, manifestó el procurador ambiental. Las diligencias que ha realizado la PROAM, se han visto limitadas en cuanto a su campo de acción, toda vez que deben de solicitar permiso de los propietarios del cañón para poder realizar las investigaciones correspondientes. Desde el 2015, el gobierno del estado habría realizado un exhorto a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) para que, en el marco de sus atribuciones, coordinara proyectos científicos que precisaran el impacto que puede traer el gas acetileno en la atmosfera, así como las ondas de choque en los microclimas de la entidad. Las presencias de los cañones antigranizo en función de las actuaciones de la Procuraduría Ambiental coinciden en un aspecto; zonas de alta producción como el aguacate, las berrys y otros frutos de alto valor de exportación. Y es que, a diferencia de cultivos de temporal, los huertos frutales de la mayoría de los tipos cuentan con sus propias fuentes de abastecimiento, por lo que no dependen de la lluvia para sobrevivir. Al 2009 llevamos 20 actuaciones en contra de cañones. Hay 11 procedimientos contra cañones, 9 en Tacámbaro y dos en Periban. Estamos limitados y no es posible llevarlos a cabo porque el funcionamiento de estos equipos está condicionado en huertos de aguacate. Cuando van los inspectores ni podemos desahogar porque no encontramos personas con quién llevar la diligencia. se llevó un exhorto a SEMARNAT para que se hicieran estudios científicos para verificar la viabilidad o daño ambiental que generalmente los cañones en todos los países”, explicó. Si bien los daños a largo plazo por el uso de cañones antigranizo no han sido completamente probados por los científicos, sí existen indicios de que modifica los microclimas, sobre todo en cuanto a la presencia de lluvia. ¿Quieres saber más de este tema? Las páginas de tu periódico La Voz de Michoacán también te informarán.